El viaje.

Miedo de perder.

Pov's Deneb.

Me despierto con los rayos de calor entrando por mi ventana. También por el olor a tocino que proviene de la cocina, miro a mi pecho y veo a Sabrina recostada en el, su cabello esta un poco despeinado y se ve terrible, de verdad que no me gusta esta chica, sólo tiene buen cuerpo y me deja follarla cuando quiero, como ayer. Necesitaba una buena ración de sexo porque mierda, quiero olvidarme de Abbi, no quiero estar enamorado, no quiero seguir sintiendo que no me le puedo ni acercar.

El botón de Sabrina está desapuntado y me dan unas terribles ganas de cogermela duro.

Mierda no mires.

¿Sexo mañanero?

Empiezo a dar suaves besos en su cuello y ella se mueve debajo de mi retorciéndose y meneando las caderas.

Abre sus ojos y me mira con deseo, mucho deseo, así que no me resisto y enrollo mis dedos en su cabello, obligandola a despertarse para darme lo que quiero.

Empiezo a moverme al ritmo de los besos en su cuello y dejo que ella sienta mi erección. Sienteme, Sabrina.

Sus jadeos resuenan en mis oídos lo que hace que me excite más.

No puedo más, le quito su jean bruscamente y meto uno de mis dedos en su intimidad. Empieza a gemir cada vez más y siento como se humedece, meto otro dedo y gime con más intensidad.

Mierda

Me quito la pantaloneta que traía puesta, al igual que mis boxers, me pongo el condón y la penetro bruscamente haciéndole gemir con fuerza y rasguñando mi espalda.

Empiezo a embestirla con gran fuerza, agarrandome de sus pechos y el marco de la cama, ella gime debajo de mi cuerpo y esto me gusta, me gusta tener sexo para relajarme.

Me muevo, me muevo sin detenerme, escuchando sus gemidos, sintiendo sus rasguños. Sintiendo su humedad, estando dentro de ella.

- Deneb... - Dice ella entre jadeos.

- Dime.

Mierda, déjame concentrar.

- Te amo - Susurra en mi oído y la penetro una última vez.

Mi erección se baja como si sus palabras hubieran matado cualquier excitación en mi cuerpo.

- ¿Qué?

Me salgo de su cuerpo y la dejo aturdida sobre la cama.

- Te amo - Esta vez sus ojos se llenan de lágrimas y yo quiero arrancarme todo el cabello.

Siento. Siento, no sé que siento, pero no es amor. Es desgracia por no poder amarla. Porque sólo me gusta para follar.

Porque estoy enamorado y lo sabe.

Busco una pantaloneta de playa y salgo de ahí. Sin que me importe otra cosa. De todos modos me gusta andar sin camisa, es mi casa. Y bueno, la de Juli.

Después de entrar al baño camino hacia la cocina y veo a todos preparando comida, menos Jose. Claro, él está viendo televisión acostado en el sofá.

Mi hermana e Isa se quedan mirándome, Juli con preocupación. Después veo a Abbi que me mira y se sonroja, cuando nota que la estoy viendo deja de mirarme hasta que Sabrina aparece detrás de mi mirándonos a todos en especial a Abbi.

Abbi me mira y hace una mueca de dolor, mierda no.

Me siento débil. ¿Qué carajo estoy haciendo?

Jose mira mal de a ratos a Sabrina, pero cuando ella no lo mira de la misma forma entonces su vista va hacia Abbi.