Hospital.

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Pov's Rebeca.

- Estoy sobrio, señora Ana.

Deneb habla frente a mi mamá con sus ojos rojos y lágrimas que caen sin parar.

Vaya que mi mamá está molesta. Y yo también lo estoy.

¿Cómo no voy a estarlo?
Si cuando estábamos en la fiesta una llamada de Sam llega a mi celular.

Él estaba asustado. Dijo haber escuchado ruidos, pero que tenía miedo de salir de su cuarto. Después escucho algo romperse y luego nada más.

Por último dijo que Deneb llevaba a Abbi en sus brazos mientras lloraba. No podía conducir porque estaba totalmente ebrio. Y al final todos llegamos al hospital. Ví a Deneb con las manos cortadas y botaban sangre como un río.

En cambio mi hermana estaba en una habitación. Pero no es por eso. No creo que sea por la herida que ha dejado el vidrio en su mano. El doctor aún no ha salido.

Y yo mientras, estoy tomando un vaso con agua para calmar mis nervios. Jared me abraza y en algunos momentos comparten miradas.

Deneb se sienta en uno de los muebles de la sala de espera. Aquí estamos todos.
Sam está tomando un café, pero ni siquiera puede tomárselo, sus manos tiemblan y sus ojos están hinchados. Llora de a poco, pero sé que en el fondo está preocupado y con ganas de golpear a Deneb.

Y algo más importante.

Sam golpeó a Deneb aquí mismo. Cuando todos llegamos estaban separados por unos celadores del hospital.

Aún nadie sabe que ha pasado. Pero mi papá está mirando con odio a todos. Incluso a mí. En algunas ocasiones sólo habla con Sam.

¿Por qué? No lo sé.

Deneb camina lejos de mi mamá dirigiéndose a la puerta principal de emergencias.

Se apoya en el cristal y llora. Llora sin detenerse, tapándose el rostro, resfregandose los ojos y cogiéndose de la nuca con desesperación. Sólo veo impotencia en su mirada.

- Cielo.

- ¿Sí Jared?

- Siéntate y descansa un momento.

- No - Miro a todos a nuestro alrededor y siento mis ojos arder - Todo es culpa nuestra. Todo es nuestra culpa por no cuidarla.

- Al menos descansa, pequeña cucaracha.

- Tonto - Ruedo los ojos y por un momento de esta madrugada me hace esbozar una sonrisa.

- Familiares de la paciente Abbigail - Un doctor no muy joven aparece frente a nosotros. Todos vamos hacia él lo que lo hace mirarnos con confusión.

- Abbi - Digo casi inaudible.

- Mm. Bien. Abbi - Él mira sus papeles y luego a nosotros - Tuvo un golpe en la cabeza. Al parecer le estaba sangrando. No es nada de que preocuparse, tranquilos. El problema fue el golpe y que no se desinfecto. Lo que hizo que al caer un poco de vidrio en la herida se inflamara más.

- ¿Todo está en orden? - Mi mamá toma con fuerza la mano de mi papá y lo mismo hago yo. Pero con Jared.

- Yo - La voz de Sam me hace girarme a donde él se encuentra - Yo iba a curarle la herida. No quiso decirme cómo se la hizo. Pero igual cuando estábamos en el baño fue cuando Deneb entro a la casa.

- Tranquilo, Sam - Mi mamá acaricia cariñosamente su espalda, sonriéndole con amabilidad.

- Hiciste lo que pudiste - Lo reconforto y luego él doctor nos mira a todos.

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