Un lugar sexy para un tatuaje

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-Lo que quiera

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-Lo que quiera.-Respondió Richard cuando le pregunté qué debía hacer.-Hay que distribuir víveres, poner vacunas nuevas y operar a varios pacientes... También hay que hacer revisiones. Lo que usted prefiera. Confío en que el doctor Lewis lo seleccionó por estar capacitado para todas esas tareas.

Asentí. Pensé unos segundos.

-¿Qué va hacer la doctora Watson?

Richard sonrió.

-Veo que le ha echado el ojo. Ya era hora de que alguien notara lo brillante que es. Si no fuera tan viejo ni estuviera casado, sería mi opción predilecta.

Me sonrojé.

-Sólo... Es la única a la que conozco un poco más.

-Claro...-Su tono fue de complicidad.-No se preocupe. La doctora Watson va a vacunar a los niños en la plaza. Usted puede hacerlo con los adultos y pedirle a la señora Hilton que se ocupe de los víveres, siempre prefiere hacerlo antes que vacunar.

-¿Quién es la señora...?

-Mi esposa. Deje, yo me ocupo de avisarle.-Sonrió y le hizo una seña a la mujer que también conducía el jeep a velocidad moderada.-¡Christina!

Sonreí.

-Muchas gracias.

Me acerqué a Emma y ella me dio una caja con vacunas sin preguntarme nada.

-¿Cómo sabes qué voy a hacer?

-No necesito ser una genio para darme cuenta de que le has pedido a Christina cambiar de lugar.

Me sonrojé.

-Yo... Sólo...

Me guiñó un ojo y me dio una bolsa con las agujas.

-Supongo que sabes qué hacer. No tienen hospital aquí así que ponemos las inyecciones en la calle. Cada paciente te dará su libreta de vacunación y debes verificar de esta lista cuáles le faltan. Yo estaré haciendo lo mismo con los niños.

Caminamos todos juntos hacia la plaza central.

La gente nos esperaba allí, en un gran tumulto. El doctor Richard comenzó a gritar instrucciones a todos para que se dividieran en filas.

Los pacientes con operaciones programadas se subieron a un vehículo especial y dos médicos se los llevaron al Campamento. Christina comenzó a repartir agua potable y comida llamando por lista.

Emma tiró de mi brazo para señalarme algo.

-La familia de Radhi.-Me dijo.

Un grupo de ocho personas se acercó. Los padres me saludaron en un inglés bastante particular y los niños en su idioma. Emma alzó a Radhi para llevarlo a un banco y vacunarlo. Era el más valiente y eso inspiraba valentía a los otros niños.

Tropical [Grintson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora