T R E I N T A Y C U A T R O

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Me acerqué a Chrystal y le indiqué con la mano que me siguiera dentro del departamento, mis amigos me advertían con la mirada, pero los ignoré.

- Toma asiento. - hizo caso a mi petición y no dudé en hacerlo también en el mismo sillón.

- Estoy esperando un hijo de Jimin.

Ese dato no me sorprendió mucho, ya que lo había escuchado de Issing, pero la furia sí invadió mi ser, ¿estaba burlándose de mí?

- ¿Y eso qué tiene que ver conmigo? Yo ya no tengo nada que ver con él.

La chica se mostró arrepentida, pero volvió a retomar su aspecto normal.

- Sé que has pérdido a tu hijo y lo lamento mucho.

- Aún estoy esperando la respuesta a mi pregunta.

- No quiero éste bebé. - soltó.

Mis ojos se abrieron de par en par, mi vista se encontró con el gran bulto de al menos unos ocho meses. Sentí envidia e impotencia, hace poco había pérdido a mi hijo y ella quería deshacerse de uno. Mis puños se cerraron y sentí como mis ojos me traicionaban al intentar ocultar mis sentimientos dejando libre a las lágrimas.

- Personas como tú no tienen derecho a ser madre, tu bebé puede oirte, ¿lo sabes? He pérdido al ser que más pude amar en toda mi vida y tú quieres deshacerte de él como si nada.

- No puedo abortar, tengo el parto programado dentro de una semana. - Chrystal estaba desesperada. - No quiero cargar con un hijo el resto de mi vida.

- Haste cargo de tus actos. - murmuré levantándome del sillón terminando la conversación.

- ¡No! No lo entiendes. - me tomó de la muñeca con los ojos rojos, comenzó a llorar entre sollozos y quejas. - No puedo criar a este hijo porque no quiero que se vincule con el padre de Jimin y los enemigos de éste se enteren de su existencia. Tú puedes criarlo junto con Yifan.

- Chrystal esa no es una opción. - respondí sintiendo un poco de compasión.

- Entonces cargarás con la muerte de dos hijos. - soltó mi brazo y salió del departamento dejando la puerta abierta.

Todos aparecieron en el marco de la puerta, entraron uno a uno y por sus miradas supe que habían escuchado cada palabra.

- No tengo mucho que decir. - respondió Namjoon encogiendo sus hombros.

- No hay nada que decir, Lenahi ya lo ha decidido. - habló Yifan tomando asiento donde anteriormente se encontraba Chrystal.

Mis ojos se pasearon por todos, pero faltaba una persona. Por más que moría por preguntar en dónde se encontraba me lo guardé para mí.

- Yoongi se fue a mitad de la conversación que tuviste, no dijo nada. - añadió el psiquiatra desinteresado.

Mi corazón se aceleró, ¿qué habrá sucedido?

🌸

- ¡Oye tú!

- ¿Quién demonios eres?

- ¡Si te detuvieras lo sabrías!

Chrystal detuvo sus pasos y giró repentinamente tropezando con su propio pie, temió por el ser dentro suyo, pero no sintió nada más que unos brazos sujetando su cuerpo de tocar el suelo.

- ¿Qué quieres? Estoy con prisa.

Yoongi tomó suficiente aire para decidir soltar las palabras que podían cambia totalmente su vida, para siempre.

- Yo quiero a tu bebé.

La mujer rio a carcajadas, quizá por las hormonas o porque no podía creer las palabras de ese hombre que la observaba con el rostro de piedra fueran verdaderas.

- ¿Estás bromeando?

- Muy bien, si así lo quieres. - se encogió de hombros y dio media vuelta sin conseguir dar un paso por las filudas uñas que lo detenían.

- Espera, ¿hablas enserio?

Volvió a voltear hacia la chica y tomó su mano alejándolo de su cuerpo.

- Volveré a repertirlo, quiero al bebé.

La sonrisa que dibujó Chrystal llegó a asustarlo, pero lo disimuló muy bien.

- Te enviaré la dirección para que puedas ir a buscar al bebé el día en que dé a luz.

- Bien.

- ¿Puedo saber cómo supiste que...- Yoongi no dejó que terminara su oración.

- Solo dale las gracias a los cielos por enviarme a ti. - levantó una mano y caminó hasta su coche negro.

Chrystal quiso saltar de la emoción, pero se contuvo por el bebé, no podía creerlo. Pensó que con la negativa de Lenahi ya no podría tener la vida de antes, pero apareció este hombre y le sacó un enorme peso sobre sus hombros. Le había mentido un poco a Lenahi sobre los motivos del porqué de su decisión de dar a su hijo, pero no podía con la responsabilidad que traía criar, además que se encontraba sola.

Su plan se ejecutaría minuciosamente, lo tenía planeado antes de siquiera conocer al padre de Jimin. Practicaría una cesárea días antes del nacimiento y fingiría una pérdida a causa de caer por las escaleras.
No necesitaba el dinero del padre, si algunas cosas de Jimin se habían transferido a su nombre, bueno, casi todo porque Lenahi había obtenido una gran cantidad.

Caminó hasta el coche que había utilizado para venir hasta ahí y se dirigió hacia la casa de los Park.

El anciano Park había recibido información falsa por parte de Chrystal sobre Lenahi, ya que pensaba que iba a aceptar criar a su hijo, pero se equivocó respecto a eso, quizá la venganza no es tan mala como parece.

Issing observó la fotografía de la supuesta "Lenahi" y bufó, iba a matar a una persona inocente, pero prefería mil veces hacerlo que matar a la pequeña Haesoo.

- Está moviéndose, viene hacia el sur.

- Acércate.

- Pero je...-

- Dije que te acerques imbécil.

El coche aceleró a fondo y sacó su pistola con el silenciador puesto, solo fue un disparo para que el cuerpo cayera como un saco de papas.

- Objetivo listo, debemos cambiar las patentes en el edificio de siempre, ¡ya!

🌸

- ¡Estúpida! ¡Te dije que te alejaras de él! ¡Lo mataste!

Todos se pusieron de pie y Namjoon fue el único que fue a abrir la puerta, Jungkook entró al departamento gritando y balbuceando cosas. Rodé los ojos, ya tenía suficiente con todos los escándalos de hoy, para que se sumara el hermano menor de mi amigo.

- ¡Lo mataste! ¿¡Cómo puedes seguir con vida!? ¡Asesina!

- Hablaré contigo cuando tengas la capacidad de razonar tus palabras.

- ¡Tú hijo ni siquiera era de Jimin!

Namjoon trató de detener a su hermano, pero fue en vano, sus palabras no causaban mucho daño en mí, gracias a las charlas que mantenía con Yifan supe como elegir las que en verdad tenían significado.

- Nunca fue su hijo, ahora si me disculpas iré a dormir.

AnormalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora