C04: La chica de las leyendas urbanas.

943 116 36
                                    

—¿Disculpa? Creo que no te escuché bien—murmuro observando la sonrisa de Lía.

—Que te conseguí la mejor cita de tu vida...—anuncia de nueva cuenta—...es con la amiga de Zabdiel, vamos Joelo; no puedes no querer ir...

—¿Cómo se te ocurrió esa...idea?—cuestiono cruzando mis brazos encima de mi pecho mientras mis amigos luchan consigo mismos para no echarse a reír descontroladamente.

—Escucha, he estado pensando en los últimos días que deberías salir más, Joel. Conocer gente nueva, enamorarte de nuevo...el último año lo has pasado prácticamente aquí encerrado aferrándote a una persona que lo más probable es que ni siquiera te recuerde....—explica mirándome con una ceja enarcada.—...vamos, Joel. El hecho de que vayas no significa que vayas a enamorarte perdidamente, o que te vayas a casar ni nada de eso...simplemente vas, hablan un poco y luego decides sí sales con ella o lo dejas por la paz....—explica ofreciéndome una amplia sonrisa que muy bien podría ser utilizada para anunciar cremas dentales.—...me pareció una buena idea,

—Oye, yo creo que Lía tiene razón, Pimentel. Ve con ella y conoce a la prima de Haziel—aconseja Richard ofreciéndome una sonrisa.

—En primera, claro que tengo razón, en segunda, no es su prima, es su mejor amiga de toda la vida y tercera, no se llama Haziel, se llama Zabdiel—explica la castaña.—pero este rubio oxigenado y mal teñido tiene razón, vamos...por favor...te juro que va a ser el último favor que voy a pedirte en lo que resta del año....—Erick suelta un risita.

—Sí yo fuera tú, aceptaría Joel.—argumenta el ojiverde—esta mañana escuché a mamá diciendo que le había llegado la invitación para la cena de gala de la recaudación de fondo de este año...

—Dale, acepto—respondo de inmediato—lo que sea para no ir a la estúpida cena de gala....—Richard me mira divertido y luego niega.

—¡Gracias, primito! Te prometo que no va a arrepentirte.—se pone de puntas para alcanzarme, revuelve mi cabello y deposita un pequeño beso en mi mejilla. Se marcha casi dando pequeños saltitos de alegría.

—¿Seguro que esa fue una buena decisión?—pregunta el rubio mirándome.

—¡Claro! No sabes lo que es ser fotografiado portando una sonrisa fingida, las mujeres que asisten sólo lo hacen para presumir sus vestidos y criticar al resto. Los hombre sólo lo hacen para jactarse de la generosidad que no tienen...es horrible—expongo sentándome en la silla de madera frente a mi escritorio.

—Me imagino, pero en realidad preguntaba porque de esa manera fue en la que conociste a tu chica de la luna...tal vez este año ella estará ahí...y definitivamente, esa hubiese sido una oportunidad increíble para volverla a ver—mi corazón deja de latir un segundo e internamente quiero lanzarme del edificio más alto de la jodida ciudad.

—¡Joder!

—No puedes echarte para atrás respecto a la cita de la extraña, y tampoco puedes ir y decirle a Lía que quieres ir, creo que ya quedó bastante claro que no comparten opinión respecto a la chica misteriosa...mientras tú te aferras a ella, Lía intenta que la olvides....—me explica Erick encogiéndose de hombros.

—¿Ustedes también piensan que tengo que olvidarla, cierto?—Richard niega.

—Escucha, somos tus amigos desde que éramos unos fetos del tamaño de un frijol dentro del estómago de nuestras madres...—frunzo el ceño—...no vamos a decirte que la olvides, porque la lógica de los humanos es complicada y por más que les digas una cosa siempre tienden a hacer todo lo contrario....y vamos a ayudarte a intentar encontrarla, pero para serte sincero Joel, no es tan lindo que te aísles del mundo por alguien que solamente viste una vez....—explica el rubio.

NO ME OLVIDES|JOEL PIMENTEL|Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora