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Aquel día me sentí mucho mejor de lo que esperaba, tras lo de ayer, mi cuerpo respondía bien y estaba más despejada ya que dormí bastante, aunque sí que tuve el sueño de siempre.

Estaba feliz porque los anteriores días, al haber sido tan atareados, apenas había pensado en mi poder, cosa que me reconfortaba porque no quería acabar haciendo ninguna tontería.

Al llegar a la universidad, algo tarde he de decir, Jimin corrió hacia mí muy preocupado. Taehyung parecía seguir ignorándome, desde el día anterior había actuado esquivo conmigo, pero decidí simplemente pasar del tema, tendría sus razones, espero.

Caminaba por los pasillos en busca de alguna cara familiar mientras me dirigía a clase, y, efectivamente, allí encontré a Jin, parecía ocupado, estaba hablando con otro muchacho, que parecía tener su misma edad. Aunque no pretendía molestar, éstos se percataron de mí y el moreno corrió hacia mí nada más me vió. 

-¿Estás bien? ¿Te duele algo? ¿Necesi...? -Interrumpí sus palabras mientras sonreía-.

-Me siento genial gracias a ti -El muchacho pareció esquivar mi mirada a toda costa, aunque continué con la conversación como si nada- Y no, estoy bien. 

El otro chico se acercó a mi lado y me saludó calurosamente.

-Hola, debes ser Isabel, yo soy Namjoon, encantado -Parecía un chico bastante intelectual debido a las gafas que decoraban su rostro, muy lindo, aunque casi tenía que inclinar del todo mi cuello para verle a la cara ya que era muy alto-.

-Encantada, sí, soy yo. -Le devolví la sonrisa que me brindaba-.

En verdad no hubo demasiadas novedades en las clases, simplemente nos llenaron de deberes por si no teníamos bastante con los trabajos que habían mandado el día anterior y no recordaba ni sobre qué eran.

Me dispuse a regresar a casa, pero antes, estaba esperando a Lisa y Jungkook para volver juntos. Aparecieron en escasos minutos y me incorporé a ellos.

-Isa, me ha contado Jungkook lo de ayer, lamento no haberte preguntado antes sobre tu estado -Me miraba preocupada-.

-No importa, de hecho, me atosiga bastante que todo el mundo me mire con cara de pena, así que me has hecho un favor -Le guiñé un ojo y saqué la lengua seguidamente-.

-Entiende que nos preocupemos, es normal... Bueno, ya dejo el tema -Le miré sonriente, en verdad agradecía que el tema que había sido tendencia aquel día al fin se sentenciara-. La semana que viene voy a tener un examen importante de marketing periodístico, y las matemáticas se me dan como la mierda -Se echó la mano a la frente, parecía agobiado-.

-¿Necesitas ayuda? No se me dan del todo mal las matemáticas y bueno, podría servirte. -Me miró, sus ojos con cierto brillo esperanzado, parecía mentira que estuviera tan emocionado sólo por haber propuesto darle clases de matemáticas-.

-¿De verdad harías eso por mi? Gracias, gracias, gracias -Se arrodilló en frente mía, al tiempo que yo le daba golpes con el pie para que se levantara y toques con la mano al hombro de Lisa para que dejara de reírse tan sonoramente-.

-Este viernes, a las cinco en mi casa. Si acabamos pronto, podríais venir a cenar -Miré a la castaña y me dedicó su cara de aprobación-.

-¿Y podemos quedarnos a dormir? -Ésta se había colocado en la misma posición suplicante que Jungkook anteriormente-.

-Está bien, lo pasaremos genial. -Sonreí mostrando mis dientes-.

Volvimos a nuestras respectivas casas, definitivamente mi piso no era lo más grande que existía pero me hacía demasiada ilusión hacer una fiesta de pijamas con todos mis amigos.

Efecto Mariposa💫Donde viven las historias. Descúbrelo ahora