Tú y yo: La casita de Natsu (Cancelada)

Capítulo 23: La verdad ante ti

— No te entiendo, Anna... ¿Natsu morirá a pesar de todo? ¿Eso es lo que intentas decirme con que fue en vano? No... No puede ser...

Anna negó con la cabeza.

— No es eso lo que quiero decir —aclaró, secándose las lágrimas—. Natsu, aun si no hacíamos ningún trato, iba a seguir con vida después de un ratito de haber muerto... Nunca estuvo planeado que muriera. El trato fue completamente innecesario. Nuestro trato, al principio, no afectaba realmente a Natsu. Pero, ahora, por mi culpa... Por mi culpa...

<< No puedes flaquear ahora >> se dijo a sí misma Anna.

— ¿Por tu culpa qué? —Preguntó Yume.
— Se volvió real —confesó—. Antes, hubieras podido romper nuestro trato, pero ahora es imposible o Natsu de verdad morirá. Lo puse en peligro real. Todo por una mentira.

Anna esperaba un golpe, gritos, reclamos o cualquier acción violenta contra su persona. Cerró los ojos, esperando pacientemente, a que le dieran lo que merecía. El golpe nunca llegó. Abrió los ojos, vio a Yume, quien no mostraba emoción algún.

— ¿Por qué me mentiste, Anna? —El tono de su voz, calmado y bajo, hizo sentir mucho peor a Anna de lo que hubiera sentido si Yume se enojaba con ella.
— Porque el mundo se dividía en tres futuros, uno donde Lucy estaba con Natsu, otro donde tú estabas con él y uno más; donde pasaban cosas malas, para todos. Tuve que elegir. Y preferí ayudar a mi descendiente. No te conocía, no sabía nada sobre ti, sólo pensé que si mentía diciendo una cosa tan grave como que Natsu moriría no te negarías a dejarlo. ¿Quién lo haría? ¿Quién dejaría morir a una persona que ama?

Hubo un silencio largo en la habitación. La única que ''hablaba'' era la lluvia, que hacía un ruido al chocar contra la ventana.

— ¿Sabes? —Anna continuó, con un poco más de confianza. Ya había dicho lo peor, ya no tenía nada a que temerle. — Por años, décadas, estuve viendo a mis familiares sufrir, por malas decisiones, por injusticias; aunque yo no supiera nada sobre mí, o sobre ellos, sentía que eran importantes. Me dolía verlo. Entonces, tanto tiempo después, un chico muy amable me devuelve todo lo que me quitaron... Y un tiempo después, me entero de que una Heartfilia, lo ama. Pensé que haría algo bueno por mi familia. Pensé que estaba bien, usar a una chica cualquiera, alguien que ya había perdido gran parte de su esperanza para vivir. ¿Qué importaba quitarle otro poco? Creía que no importaba.

Anna sonrió levemente, intentando aligerar su carga, pero era imposible.

— Así que mentí descaradamente. Y esa chica que usé para ayudar a mi descendiente, resultó ser amable, me dio un lugar para vivir y me enseñó un montón de cosas sobre el mundo actual; respondía todas mis preguntas, sin importar lo tontas que pudieran ser. Me encariñé con ella. Mucho. Y me arrepentí de lo que había hecho. Quise decírselo, para que ella pudiera estar con el hombre que quería, pero me avisaron... Que por mis malas acciones, el trato que inventé, se había vuelto real... ¡Lo siento! ¡Por favor, perdóname!

Yume guardó silencio. Un largo silencio.

— Yume, yo...
— No quiero seguir escuchando —dijo, cubriéndose los oídos—. Entiendo el motivo, Anna, no hace falta que digas más. Por favor, ya no digas nada. Estoy cansada.

Lentamente, Yume se levantó de la cama y caminó fuera de su habitación. Anna no quiso detenerla. En cuestión de segundos, la chica ya estaba afuera, caminando debajo de la lluvia con rumbo desconocido... 

***

Natsu: Hannah, ¿dónde estás? *encuentra una nota que dice ''Me fui de vacaciones a Bora Bora''* ... ¡¿Qué?! ¡¿Y quién va a despedir el capítulo?! Bien, todo depende de mí... ¡Que les haya gustado el capítulo! ¡Ha sido un poco corto, pero ya vendrán algunos más largos! ¡Vamos en la mitad de la segunda y última temporada! ¡Nos vemos a la próxima! ¡Adiós! 

*Natsu se pone a leer el capítulo* 

*Suda* 

*Abre la boca, grita ''¡¿Qué demonios?!'' y casi se desmaya* 

Natsu: ¡Hannah, vuelve aquí! ¡Tienes que explicarme esto!