Fui a mi cama por la noche, quería llamar a mamá pero mi tía me había dejado bien en claro que no tenía señal en su pequeña parte del mundo. Así que decidí salir a buscar algo que hacer; Liz me había pedido que seleccionará canciones para el baile y la marcha nupcial, así que fui de camino al salón pero estaba ocupado, los padres de los chicos y un par de personas mas que no preste atención, salí al jardín.
Me senté en la silla reposera que se había convertido en mi cama hace un par noches y me dedique a mi trabajo, pasaba una canción tras otra, las canciones para este momento debería ser especial, debería ser la más mágica y perfecta para ellos.
-¿Qué haces aquí?- Sam se acerco a mi
-Preparando las canciones para Lizzie
Sonrió rodando los ojos, hasta a él le molestaba que ella absorbiera mi total tiempo, pero teníamos en claro algo: para eso estaba aquí.
Me quito el móvil, los audífonos y la libreta, dejándolos en la mesa junto a nosotros para tomar mi mano y llevarme adentro
-Mis padres quieren que vengas a probar sus quesos, están frescos
Había un gran problema con el queso y mi intolerancia a la lactosa, no quería ser descortés y también necesitaba un respiro.
Tim estaba junto a ellos, era más algo familiar. En la mesa había trozos de queso que apestaban la habitación.
Al revelar mi intolerancia a la lactosa vi una tristeza en los rostros de los padres de Sam, al parecer les apasionaba realmente lo que hacían, me ofrecieron vino a lo acepte sin titubeos
-¿Sabes catar?- Sebastian me pregunto al servirme un poco de vino tinto en la copa
-Me temo que no soy experta
-Suerte la tuya- Tim se acercó a mi y tomo mi copa con total educación
-Tim es el mejor en esto que Sam
-Yo nací con un paladar más fuerte para los quesos
Tim movía la copa y la acercó con suavidad a mi nariz
-¿Lo sientes?- murmuró de manera íntima solo para nosotros- no me lo digas, solo siéntelo
Después lo paso a su nariz y absorbió los olores, era dulce, el olor a uva tan prominente y el alcohol lo suavizaba.
-Para esto no solo necesitas tu paladar, tu vista, tu olfato, la garganta, el ambiente son fundamentales para poder sacar lo que una copa de vino te dice.
Al pasar cada palabra los demás nos comenzaron a ignorar, estábamos a unos metros, cerca de la barra.
-Es un vino joven, pero eso lo se yo porque sé de qué cosecha viene- se colocó más cerca de mí y alzó la copa a mi vista- ¿ves esos tonos como rubí?
-Sí
-Eso nos dice que tan joven es, por último- me tendió la copa- sorbe pero no solo sientas con el paladar, recuerda el color, los olores, pídele a tu garganta que sienta hasta el último resto de este
Di un sorbo pequeño y pasó por mi garganta, lo sentía un poco áspero pero era totalmente increíble.
-¿Qué dices?
-El mejor vino que he probado hasta ahora
-Somos dos- dejó la copa de lado- es mi vino favorito.
No había prestado atención en lo cerca que estábamos y lo apartado que estábamos de los demás
-Cuando lo pruebes recordaras esto, es la magia de los sentidos y la memoria
Se apartó de mí para cederme el paso y caminar de regreso al sofá
-Yo podría ser el que conquista con una copa de vino y palabras suaves- Sam se quejaba con sus padres
-Tu eres mi pequeño ratoncito- su madre le sonrió con ternura
-Y eres el mas guapo- Sebastian miró a Tim- sin ofender hijo, tienes un rostro más de...
-Arte- solté para ayudar con el aprieto en el que se había metido Sebastian, pero ahora yo estaba en uno cuando todos me miraron
-¿Si?- Tim me prestó total atención, esperando a que no tuviera una respuesta que no alzara su ego
-Tienes un rostro perfecto- mis mejillas tomaron un tono rosa, lo sabía por el calor en ellas- pero sabemos que esa definición es relativa, como en el arte, te tienen que descubrir más allá y basarse en las emociones que haces sentir, en cambio Sam es un término más global de belleza- pase saliva- cualquiera caería por esos ojos azules o esos labios
-Lo tomare como un halago- no me despego los ojos de encima
-Buena manera de salvarme- Sebastian me guiño un ojo y yo sonreí apenada
¿De dónde había salido eso? Ni yo lo sabía, pero todo el ambiente alrededor de ellos me inspiraba a dejar mi lengua soltarse sin problema
-Buenas noches- Sebastian y Margot se despidieron cuando el sol desapareció por completo
Un beso en la frente a cada uno de sus hijos por parte de Margot y una sonrisa para mi. Sam se sentó en el banquillo del piano y pasaba sus dedos con suavidad, supongo que ninguno de los tres podía hacer que su organismo durmiera a la hora que debería
-Tu familia es- me senté junto a Sam
-Antigua- continuó él con una sonrisa divertida
-Si, es como volver en el tiempo, no hay ni una televisión solo en la sala de juegos
-Nos entretenemos con tantas cosas aquí, que es imposible tener tiempo para banalidades
-Y la mayoría de nosotros lo utiliza para tomar un respiro- Tim estaba moviendo una copa de vino frente a él
La platica termino, cada uno estaba en su lugar personal
-Mañana deberíamos hacer una fogata como en los viejos tiempos- Sam comentó a su hermano
-Me gusta la idea- dejó la copa en la barra- pero esta noche ya los tengo que dejar, necesito dormir aunque sea unas horas
-Pasa buena noche- comente y él me dedicó una mirada
-Lo mismo digo
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Lost life
Teen FictionEl tiempo perdido y la rutina, esos son los más grandes enemigos de una persona y en este caso, lo único que conoce Sofía. Dedicada a una vida que ella no había tenido oportunidad de decidir, era la vida que le había tocado. Eso era todo, sin desli...