Lost life

Capítulo 36: Perder para encontrar

La fiesta comenzó, yo no podía dejar de pensar en esa tarde y beber, si alguien me preguntaba ya podía decir que era una realidad que no todos somos tan fuertes como creemos y no todos soportamos todas las tormentas, Tim me podría describir como el huracán más grande que arrasó con él pero yo también podía decir que había dejado un desastre, un mundo devastado con solo unos meses.

-¿Destino?- Finn, la bendita compañía para el momento débil apareció con un vaso de una bebida colorida.

El llevaba un traje de pirata, atractivo con su delineado y la vestimenta antigua, mientras yo era felizmente Ariel con piernas, Sam jamás me convencerá de andar por ahí brincando con la cola de sirena

-Eso parece

Tome su vaso y di un par de tragos a lo que le dio pié de haber encontrado compañera para esta noche.

Perdí la cuenta de lo mucho o poco que había tomado a comparación de Finn, él parecía fresco como una lechuga y yo un mosquito que acababa de salir vivo de una fumigación.

-¿Quieres que te lleve a acostar?

Yo estaba tan mareada que tenía que llevarme casi en brazos, esquivamos todo el tumulto de gente, no sabía de dónde habían salido tantas personas, tampoco si yo reconocía a alguna. Muchas personas me saludaban con alegría pero yo solo podía tratar de mantener mis ojos orbitados. Finn me dejó sentada en la cama y me miró un segundo, antes de poder darle las gracias corrí al baño a vomitar todo lo que habia tomado, mi lengua sabia a acido y me sentía un completo asco, me había percatado de que Finn sujetaba mi cabello y colocaba su mano en mi espalda

-¿Porque te ves bien aun?- le pregunté arrastrando las palabras y recargando mi cara en la tapa bajada del baño

-Estoy acostumbrado

Saco de su bolsa mentas para meter una en mi boca

-¿Quieres que me quede para que no te ahogues con tu lengua?

-No quiero morir

-Nadie quiere, vamos

Me llevo de nuevo a la cama y ayudó a quitarme los zapatos

-¿Te ayudo con algo más?

Lo tenía tan cerca que solo pensé en una cosa, besarlo, tal vez era lo menos lindo, lo mas asqueroso con mi boca oliendo a ebrio pero a él no parecía importarle. Me bajo hasta estar acostada en la cama, mis piernas se enroscaron en su cintura y el sonrió sobre el beso apartrandolas

-Lo vi en una película- me justifique pero parecía solamente divertido

-Eso no se hace

El ambiente se sintió más acalorado para mi, aun mas aunque la parte de arriba de mi disfraz hubiera desaparecido y solo me cubrían besos del chico lindo sobre mi, yo era torpe, no solo por el hecho de estar ebria, si no porque jamás había estado con un chico. Finn era intimidante en estos momentos, tan experto que me sentía casi como una niña torpe en sus brazos, no estaba insegura de mi cuerpo y mucho menos de mi pero si era una inexperta.

-Llámame como quieras- Finn había soltado después de que el nombre de Tim se escapara de mi boca sin siquiera notarlo

Lo detuve cuando sus manos se deslizaron bajo el abultado vestido que llevaba. Quería que mi cerebro y cordura no me abandonaran, no ahora.

-¿Qué ocurre?

Lo aparte de arriba de mi y busque algo con que cubrirme, aunque el ya conociera la sensibilidad de mi piel.

-Si estuviera sobria me sentiría mas capaz de tomar esta decisión y créeme sobria no hubiera ocurrido

-Tu me besaste

-¿Alguna vez te dijeron que sabes a pecado?

Mi cerebro solo había reaccionado para apartarlo pero para mi boca aun no llegaban bien las señales, él parecía divertido

-Eres la primera

-Lo siento, no sé lo que digo- me percate de su torso descubierto, era mucho más musculoso de lo que esperaba y tenía un bronceado que le quedaba perfecto

-No es que no sienta un halago que me veas así pero no es igual si tu estas cubierta

Me disculpe y aparte la vista, eso no debió haber ocurrido, no sabía cómo verlo a la cara.

-¿Quien es Tim? Y no te atrevas a hacerte la desentendida- me advirtió al ver por mi gesto que buscaba cambiar de tema

-Estoy ebria

-Y solo asi me vas a decir la verdad

Me tumbe en la cama de nuevo y él me imitó, era verdad, solo asi lo contaría y no sabia cuantas ganas tenía de contar sobre él hasta que lo hice, Finn me miraba con atención, escuchando todo lo que quería contar sobre él.

-No todos queremos ser encontrados, se disfruta tanto el buscar el camino que  veces jamás lo encuentras

-Lo sé, le dije a Sam que no buscaba más chicos perdidos cuando me encontré contigo

-La única diferencia es que yo se que lo estoy, soy un chico huérfano que vivió con su abuela hasta que esta falleció y ahora no busco otra cosa más que disfrutar mi vida mientras sigo aqui y tu, se te fue el camino que querías seguir, él del confort

-No quiero lo que tú me ofreces Finn

Se encogió de hombros y se giro viendo al techo, yo seguía viendo su perfil, solo yo quería pensar en una situación con tantos niveles de alcohol en mi cuerpo, tomar una decisión entre el chico que aun queria solo tener esa relación abierta y ayudarme a olvidar. No tenía ni un poco que temer, Finn no era mi tipo y lo sabía, jamás me enamoraría de él. Solo nos usamos, pero al pensarlo un par de veces y la noche paso, me parecio increiblemente estupido.

Me incorporé cuando él estaba dormido, al ver imposible el bajar las escaleras por la cantidad de personas dormidas en la sala y pasillo, me senté en la escalera con la mirada en la nada

-¿Todo bien?- Ezra él baterista de la banda de los chicos estaba frente a mi

Levantaba los vasos del suelo y los juntaba en una bolsa negra, el reloj del pasillo anunciaba las seis de la mañana así que me parecía un poco extraño, él no había bebido y lo sabía porque en más de una reunión él se limitaba a beber refresco

No quería responder un sí y tampoco un no tras su pregunta, me indico que le hiciera un lugar junto a mi.

-No pareces del tipo de chicas que se va con Finn. Te vez sensata y con algo aqui arriva- toco mi cabeza haciendome sonreir

-¿Conocés mucho ese tipo de chicas?

-No tienes idea, compartir departamento con él a veces no es lo mejor

-¿Porque no bebes?

-Bebi suficiente en la adolescencia y tuve muchas fiestas como estas.

-¿Estamos grandes para esto?

-Nunca se es grande para disfrutar si es lo que te gusta

Asenti, me sentía identificada con ello, yo no queria mas fiestas cada noche o estar en camas con chicos de una noche, no pensaba de esa manera, no quería iniciar ahora a pensar así

Me pidió que lo acompañara a la cocina para darm un suero y una aspirina para el dolor de cabeza

-No soy para nada esto- me sentía apenada viendo como se llevaba una idea distinta de mi

-A veces hay que perderse para encontrarse

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¿Estaba listas para la segunda temporada?
Ya estamos a pocos capítulos