Enamorado de un chico de compañía (Primera Parte)

Capítulo 45

LUKA:

Los días pasaron y poco a poco iba terminando el retrato de Ian. Al principio me costó mantenerle quieto durante más de cinco minutos pero a partir de tercer día pareció tener más paciencia. Por mi parte, había terminado el boceto y ahora estaba repasando con carboncillo las partes más destacadas como los ojos o la mandíbula aunque aún me quedaba  el pelo y difuminar todo el retrato.

Hoy era un día como todos los que habíamos quedado para terminar el dibujo (Que enrealidad eran los únicos que habíamos quedado) con la diferencia de que la iluminación era perfecta. El dorado reflejo del sol favorecía la masculina mandíbula de Ian y sus verdes ojos brillaban, pero era capaz de percibir que hoy estaba diferente, como si estuviera pensando en algo contínuamente. Al principio lo ignoré pensando que sería cualquier tontería pero finalmente decidí preguntar tras terminar de repasar con una fina línea los músculos del cuello.

-¿Qué te pasa? Estás muy serio.

La sonrisa de Ian afloró enseguida pero esta vez tenía menos fuerza.

-Estoy pensando en una cosa importante.

Al parecer el rubito se quería hacer el difícil y me obligó a continuar preguntando.

-¿Me vas a decir lo que es?

Su mirada recorrió cada parte de su móvio que estaba apagado y por primera vez le vi de esa forma. Era como si se estuviera derrumbando por dentro y sus apagados ojos rogaban por que le ayudase.

-Ayer hablé con Lulu, aunque este tema salió hace mucho pero no lo quería afrontar.

En silencio continué haciendo pequeños trazos por el pelo sin dejar de escuchale.

-Lulu... sabe que he dejado el trabajo y estaba buscando una solución por que yo no lo hacía.

-¿Solución para qué?

Aparté la mirada del lienzo para verle mejor la natiz y continué dibujando.

-Para mi trabajo.

En ese momento su tono se volvió serio indicando que cada vez estaba más cerca de saber el problema.

-Pero si lo dejaste, ¿Qué problema tienes ahora?

Ian hizo una pequeña pausa antes de hablar despacio.

-Con el dinero de mi trabajo mantenía el apartamento y la moto. Ahora me puedo ayudar de oa herencia que dejaron mis padres pero aún así ese dinero se acabará gastando y tengo que ahorrar de alguna forma.

En ese momento me arrepentí de haber sido tan egoísta pero también era incapaz de decirle que volviera a trabajar como chico de compañía porque era demasiado celoso como para dejarle hacerlo.

-Estamos en una ciudad, encontrar trabajo es fácil.

Dije ocultando mis sentimientos divididos que se reflejaron cuando moví una de las líneas. Mientras lo borraba, Ian continuó hablando, cada vaz más tenso.

-Eso le dije a Lulu. Que podía encontrar cualquier trabajo pero al parecer ella se adelantó a mí y habló con mi tío.

-¿Por qué hizo eso? El encontrar trabajo es cosa tuya, ¿no?

Esta vez dejé de pintar y mi lirada se clavó en sus verdes ojos.

-Lo es, pero cuando habló con él no fue directamente hablando del tema. Solo estaban hablando cuando mi tío la dijo que necesitaba a alguien más que se encargara del taller y... ella le contó que había dejado el trabajo.

Me lavanté de la silla y me senté a su lado preocupado por el tono con el que hablaba.

-Pero entonces está bien, es mejor trabajar con familia.

No sabía a qué se debía ese tema serio o por qué le ponía tanta angustia al tema cuando no había nada de malo en lo que me decía.

-Ese no es el problema.

Ian me agarró la mano y todo mi cuerpo se tensó ¿Qué pasaba?¿Por qué actuaba así? No dije nada cuando él continuó hablando.

-Mi tío vive lejos de la ciudad, a unas cuatro horas y si hacepto trabajaré varias horas por lo que no podré verte muy seguido.

Una parte de mi corazón se detuvo al sentir una oleada de temor y angustia intentando asimilar lo que estaba ocurriendo, preparándome para despedirme de por vida pero una tonta pregunta de esperanza salió débil de mi garganta.

-Pero no lo vas a aceptar, ¿Verdad?, buscarás otro trabajo.

Entonces me miró con esos delicados ojos y no sonreían ni vacilaban, solo me miraban con cuidado de no hacerme daño. De repente, mi garganta formó un doloroso nudo y mis ojos luchaban por no llorar.

-No puedes irte. No quiero que te vayas.

Ian acarició mi pelo y me dedicó un delucado beso en la frente.

-Tengo que hacerlo Luk, mi tío me necesita. A demás, nos seguiremos viendo.

Dijo con una voz temblorosa.

-¿Y si no lo hacemos?¿Y si nos separamos?

Unas flojas lágrimas salieron de mis párpados quemando mis mejillas.

-Eso no pasará. No porque no te dejaré ir.

-No es por eso Ian... es porque eso pasa en las parejas. Un día la quieres y luego...

El rubio me dio un beso en la mejilla.

-Luk, por favor, no hagas esto más difícil de lo que es. No pienses en eso ahora ¿Vale?

Asentí levemente y limpié una lágrima que caía por mi mejilla mientras el continuaba hablando.

-A mi tampoco me gusta la idea, pero no puedo dejar de trabajar y mi tío necesita ayuda así que no tengo elección.

El chico acarició mi mandíbula y esta vez su sonrisa tenía más fuerza.

-Es que tengo miedo de que salga mal y lo dejemos.

-Oye, ¿Conoces Skype?

A pesar de mis ojos enrojecidos le miré con cierto aire de obviedad.

-¿Cómo no lo iba a saber?

-¡Pues ya está! Todas las noches a la misma hora hacemos una videollamada. Será imposible que te olvides de mí.

Sonreí levemente y apoyé la cabeza sobre su hombro para después hablar mostrando todo el cariño que pude.

-¿Sabes? Creo que te quiero demasiado.

Ian acarició mi muslo riendo levemente.

-Te quiero Luk.

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NOTA DE LA ESCRITORA:

¡Hola caramelitos!

Este es el capítulo 45 y os tengo que decir que el final ya está llegando (◞‸◟) y es que ¡solo quedan dos capítulos!

De verdad que agradezco mucho vuestro apoyo en esta historia pero aún no me quiero despedir caramelitos poque ¿Y si hubiera una segunda parte? ( ͡° ͜ʖ ͡°)

¡Espero que os guste muuucho el final de esta aventura con estos chicos tan enamorados!

¡Nos vemos en el primer final!