—Espera... espera... ¿hablas de la misma Bastet? ¿Tu antepasada Bastet?— Dorian sacó su mapa sin prestarle atención a su pregunta y después le respondió sonriendo.
—La única manera de hacer tiempo para prepararnos es escondiéndonos en un lugar donde jamás puedan encontrarnos, y eso significa que tenemos que buscar un lugar en el pasado donde Gedeón no exista, podemos aprovechar el viaje para apresurar tu proceso como hechicera, ¿y que mejor que con la mismísima Bastet?
— ¿Viajar en el tiempo es posible?— preguntó más curiosa que espantada.
—Claro que sí, ya deberías saberlo, tú ya estuviste en 1692 cuando los protectores de la realidad casi te queman en la hoguera. — le respondió desdoblando aun el mapa.
— ¡por eso todos vestían así! ¿Entonces estuve en Salem?—Dorian la miró y asintiendo levantó una ceja.
—También Gedeón estuvo en el pasado pero no creo que piense que visitamos a Bastet, siempre he querido viajar para visitarla pero nunca he tenido un buen motivo, pero ahora que tú serás su reencarnación, podría ayudarte, dame tu mano.— dijo firme y repitió el conjuro para ir a Storm Ville.
De nuevo llegaron al jardín, pero esta vez no pasaron a la mansión y siguieron el sendero al bosque para ir a la cabaña de Bastet. Justo cuando estaban en medio de la maleza Dorian se puso serio, y bajando la mochila respiró hondo, tomó a Inés por la cintura pegándola a él y la miró regalándole un guiño.
—Con la vibración que elevaste ahora es más fácil viajar en el tiempo, ahora pon atención a la clase, para viajar a otros tiempos debes de concentrarte imaginando el lugar y el año, es difícil, además de tener vibración necesaria... pero eso brujita; ya la tenemos. —Dorian dejó mostrar una hermosa sonrisa seductora e Inés sonrió contagiada aun con las mejillas rojas. —Después creas una halo de energía suficiente que te cubra, yo crearé una para los dos; para este hechizo no se necesita conjuro, solo basta con la energía, a partir de este momento me perderás por unos segundos, pero no te preocupes, sigo aquí.
Inés no comprendía en ese momento, y notó a Dorian concentrarse, su piel comenzó a ponerse pálida y sus ojos de volvieron blancos, el brazo que la rodeaba estada como pegado a su piel, estaba en una especie de trance, y entonces al ver el halo de luz rodeándolos cerró los ojos cegada, al abrirlos se dio cuenta que se encontraba en el mismo sendero pero el bosque lucia más diferente, mas lleno de vegetación, pero sobre todo Dorian no estaba ahí con ella, aún tenía puesta la capa roja y por segundos se sentía en el cuento equivocado.
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Engatozada: Dorian
Romance(ENGATOZADA Parte 3) Dorian Krentz hechicero poseedor de la magia de Merlín es el encargado de conservar el equilibrio de la magia en el sistema de todas las cosas, y para lograrlo tiene que mantener con vida a Inés Covenage, una mujer solitaria a q...