Engatozada: Dorian

-CLASES DE MAGIA-

A la mañana siguiente Inés pasó la noche en una habitación que Morgan le estableció, junto con ella pasó la noche ahí Ivonne, quien se recuperaba poco a poco de varias costillas rotas.

— ¿En verdad le regresaste el cristal?—Preguntó Ivonne sin moverse de la cama.

—si... en otro momento lo hubiera aceptado encantada sabiendo que pasaría mi vida entera con él, ¿Qué se supone que tenía que hacer Ivonne? Unas horas antes me mandó a la friendzone...—dijo sentándose derrotada en la cama de enfrente.

— ¿y él que te dijo?

—Se quedó callado y después una enfermera llegó a curarle su herida de la ceja, ¡me siento furiosa con la situación!

—Conociendo a Dorian creo que le diste en el orgullo, si lo piensas bien... tú también lo mandaste a la friendzone.

—No creo eso, yo solo le dije que no estaba dispuesta a tener hijos con él si no era por amor. —Inés tomó su bolso y sacó las cosas que Merlín le había dado, entre ellas un estuche de polvo compacto...— ¿Por qué Merlín me regalaría maquillaje?— al abrirlo había una inscripción muy pequeña en el espejo. —aquí dice... "di el nombre de alguien con quien quieras hablar", ¿Merlín? —de repente el espejo cayó sobre la cama abierto y del reflejo salió el espíritu del mismísimo Merlín, Ivonne se movió un poco impresionada y se quejó del dolor, Inés se mantuvo tranquila pero sorprendida.

— ¡Inés! ¿Lo lograste?— preguntó el espectro de Merlín e Inés se alegró de que aun recordara lo último que habían pasado.

— ¡Merlín! No... aun no, es más difícil de lo que pensaba, él no quiere una relación amorosa, solo le interesa la magia...

— ¡pero niña entonces  tienes todas las de ganar!

— ¿A qué te refieres?— preguntó prestando más atención.

—Él ama la magia Inés, tu eres una hechicera, una muy buena; si pasaste la prueba de Bastet es porque eres la mejor, lúcete frente a él, muéstrale tus mejores hechizos de los que has creado, si no cae a tus pies coqueteándole, ¡caerá a tus pies por ser una hechicera maestra!

—Tienes razón... gracias Merlín... ¡Una cosa más! ¿Estuvo bien que rechazara el cristal de Bastet?—Merlín se sorprendió tanto que comenzó a flotar por toda la habitación indignado.

— ¿lo rechazaste? ¡Pero si tú ya tienes el consentimiento de Bastet!...

—Pero no quiero estar con él sabiendo que no me ama, y peor aun sabiendo que solo lo hace por la magia, si no logro que me recuerde prefiero alejarme...— dijo limpiando las lágrimas que comenzaban a traicionarla.

—Inés... sé que te debes de sentirte fatal, pero recuerda lo culpable que se sentía Dorian por el error que cometió, te hizo prometerle que lo harías recordarte, él te repitió mil veces que te ama, tú lo viste, solo se requiere un beso para que recuerde todo, no te rindas.