La vida del antisocial no es fácil

Favores por cumplir

-¿Qué piensas hacer?- Dijo Joe mirándome intrigado.

-Voy a intentar investigar algo que lleva incomodándome desde esta mañana- Dije decidido.

-Bueno, si sale mal y vas a la cárcel, no me eches la culpa, yo no hice nada malo- Rió Joe.

-Eso sí, necesitaré a alguien que los entretenga, y esa serás tú, Mia- Dije ignorando a Joe.

-¿Eh? A mí no me metas en tus planes, de paso esta tarde tengo cosas que hacer-Dijo intentando escabullirse.

-Encima que te apoyé para que empezaras tu relación con Isaac, de verdad, haz favores para esto- Dije indignado.

-Si quieres puedo quedar con Emily con la excusa de que me enseñe la ciudad, así también consigo información que pueda serte útil- Cedió.

-Trato hecho, pero tienes que contarme todo lo que hagáis- Dije entusiasmado.

-Claro, primito acosador- Dijo pícara.

-Como veo que se me está ignorando me voy a ir yendo, Alex, que no se te olvide ir antes de las cinco para recoger las cosas- Dijo Joe empezando a subir la cuesta hacia su casa.

-Adiós- Dijimos Mia y yo al unísono.

-Es un buen tipo, pero no pegáis como amigos en absoluto- Confesó Mia.

-Nos lo dicen mucho, pero somos amigos desde los tres años a pesar de que no nos parezcamos en absoluto, así que como verás hay veces que la gente se equivoca- Dije llegando a la puerta de mi casa- Otra cosa, ¿por qué te quedas a comer?

-Ah, eso. En realidad no me voy a quedar a comer, solo quería acompañarte hasta aquí. Normalmente me voy sola y es bastante aburrido- Rió.

-Por lo menos he conseguido idear el plan para esta tarde, después hablamos y te voy diciendo las instrucciones- Dije.

-Claro, pero que te quede claro que es el último favor que te hago, esta tarde tenía planeado quedar con Isaac y lo voy a cambiar por ti- Afirmó.

-Muchas gracias, ya hablamos- Dije abriendo la puerta y contemplando como Mia empezaba a andar.

Entré y lo primero que noté fue un fuerte olor a quemado penetrando en mi nariz. Acto seguido vi a Axel bajando por la escalera rápidamente con una sartén en llamas en la mano.

-¿Axel? ¿Qué cojones estás haciendo?- Dije intentando mantener la tranquilidad.

-Pues intentaba preparar un festín para sorprenderte cuando algo salió mal- Dijo con la sartén aun en la mano.

-¿No pensaste en coger el extintor?- Pregunté al borde de perder la calma.

-Eh… ¿tienes extintor?- Preguntó asombrado.

-No, esa cosa roja que está en la cocina y tiene forma de extintor es solo de adorno- Grité perdiendo la calma.

-Bueno, tampoco te pongas así, es algo que le puede pasar a todos- Dijo tranquilo.

-¿Por lo menos vas a extinguir el fuego de la sartén?- Dije al darme cuenta de que esta todavía seguí en llamas.

-Es verdad, voy a utilizar el extintor- Dijo volviendo a la cocina.