Flowers Of Love.

Capítulo 21 - My Little Mouse.

La comida no había estado mal. Tal y como había dicho Chūya, hubo variedad, especialmente por los rusos y sus desacuerdos al comer, nadie se limitó a un solo platillo, tomaron de varios probando así de todo un poco. El único problema eran las bromas del castaño con esas indirectas, se ganó varios regaños por parte del pelinaranja mientras el azabache ruso parecía hacer caso omiso mientras comía, pero, Akutagawa había notado como este se limitaba a los bocados que ingería.

Lo hacía de manera lenta y en pequeñas porciones, como si realmente hubiese perdido el apetito a pesar de la exquisitez de ese platillo, durante la comida, Akutagawa intentó hablarle, sin embargo no entendía porque el castaño estaba tan hablador con él, le ponía hasta nervioso que su superior de vendajes le hablara como a una chica a la que le coqueteaba, le hacía querer retroceder.

Akutagawa, para mantenerse lejos del castaño, se ofreció a levantar la mesa, lo que se había usado mientras Fyodor tomaba la escoba y se disponía a barrer en silencio, se notaba que estaba incómodo, eso podía notarlo el menor, del poco tiempo que llevaba con Fyodor, era la primera vez que lo veía con esa incomodidad que disimulaba mirando el piso sin mucho interés.

A Fyodor no le gustaba ver el piso sucio, ni siquiera con un poco de polvo o manchas, le provocaba querer limpiarlo de inmediato, no porque fuese un lunático obsesivo de la limpieza, eran más bien costumbres que le había dejado su madre, pero a su lado paso el castaño dándole un leve empujón tirando algunas migajas de un plato que llevaba a la cocina.

— Ah, mi culpa. —Habló el castaño un poco burlón notando como el azabache se mantuvo inexpresivo.

— Ten más cuidado. —Se limitaba a hablar poco, ni siquiera le apetecía pronunciar palabras pero el castaño pasó a dejar el plato en las manos de Gin para que lo llevara a la cocina, de esa forma también sujetó la escoba llamando la atención del ruso.

— Quien debería tener cuidado aquí eres tú, rata. No perteneces aquí, tampoco podrás estar jugando todo el tiempo a la Familia con ellos. —Murmuró haciendo que sus miradas se enfrentaran, ni uno ni otro quería someterse, eran como dos Alfas peleando terreno.

— Si es todo lo que tienes que decir, déjame barrer. —Esquivó intentando recuperar la escoba pero el castaño no cedió en su agarre.

— ¿Es por Akutagawa-Kun que aguantas? —Preguntó con una pizca de burla. — Pierdes el tiempo, Akutagawa-Kun ha estado en mis manos desde hace mucho tiempo... Y lo continuara estando por más, aunque claro, si eres paciente podría darte las sobras. —Ese comentario fue suficiente para que el ruso soltara la escoba y le empujara apartándole del camino.

— Veo que quieres barrer, hazlo tú entonces. —Masculló tomando los platos de la mesa para ayudar al joven mafioso de cabellos azabaches que regresaba con un trapo y el atomizador con detergente.

Cuando terminaron la pequeña limpieza, pudo ser hora de que el castaño se marchara, pero no lo hizo, como sugerencia opinó que vieran una película, algo que Gin apoyó junto a Nikolai. La joven azabache fue a sacar los postres que había comprado el castaño a la vez que disponía a preparar algo de té, sabía que el té era algo que Fyodor nunca rechazaba, mientras tanto el resto fue a tomar asiento, excepto Chūya quien fue ayudarle a la jovencita con los platos, tazas y demás para poner todo en el centro de la sala, en cambio Nikolai, yacía preparando un tendido para él y Gin en el suelo sobre la alfombra.

Sólo quedaba por elegir la película, habían escogido una película de terror para "mejorar" el ambiente según Dazai. Akutagawa tomó el DVD colocándolo para después tomar el control y presionar play antes de volver a tomar asiento, pensaba hacerse un espacio con Fyodor y Chūya, sin embargo el castaño le había jalado de la playera haciendo que se sentara a su lado. No protestó, solo guardó silencio con un nerviosismo notorio, cualquiera podría pensar que estaba actuando como una mujer realmente avergonzada de estar cerca del chico que le gustaba... Pero, ¿Era realmente eso?