El herrero y la bestia (TERMINADA)

La batalla por el castillo P1

Tan pronto como la nadder avisó lo que acontecía a lo lejos, la bestia salió de la gran ventana de la torre para trepar hacia lo más alto de esta y tener una mejor visión del panorama.

Ahí, vio que los dragones que custodiaban las entradas al castillo gruñían a la maleza que se movía como si hubiera algo enorme caminando entre los árboles.

—Stormfly, debemos organizarnos... ¡llamemos a los demás!

La nadder obedeció y bajó en picada para reunirse con los dragones y demás criaturas que se empezaron a reunir en el comedero. Astrid la siguió dando un gran salto, olvidándose por completo que en la habitación de la torre Poppy y Branch se habían quedado.

—Mmmm... parece que una batalla es lo único que puede hacer que se saque al herrero de la cabeza. —analizó Branch la situación.

—¡Eso es terrible! ¿Qué tienen de emocionante las batallas? ¿Qué hay de "amor y paz hermanos"? —preguntó Poppy exaltada.

—Pues díselo a ese lobo loco, Poppy yo me voy... me voy a bunker, ni loco me quedaré a ver como se matan.

—Qué bunker ni que nada... ¡nosotros también vamos! —dictaminó Poppy con un gran grito, tomó sorpresivamente a Branch de la mano y así como había hecho Astrid se lanzó con él desde la ventana y preparó su cabello rosado para el aterrizaje.

Lo único que fue audible en ese momento fue el grito de batalla de la rosada y el grito de terror de amargado.

.

.

—¿Qué haremos?

—¡Son demasiados!

—¿Qué táctica usamos?

—Tranquilos, todos tranquilos. —trataba de calmar Astrid a la multitud de dragones que a pesar de los entrenamientos y su nueva confianza adquirida aún no habían tenido la oportunidad de aplicar lo aprendido en una batalla real.

—¡Astrid!

Luego esa voz. Astrid trató de no demostrar nerviosismo, no era el momento para eso, así que considerando el consejo que le había dado el troll acerca de controlar sus sentimientos trató de actuar como si nada con él.

—Astrid... ¿qué es lo que pasa? —preguntó Hiccup abriéndose paso entre la multitud junto con Toothless.

—Ahh...—Era difícil. Balbuceó viéndolo de arriba hacia abajo, notando que llevaba con él una un artefacto largo y rojo entre sus brazos.

—¡BestiAstrid responde! —llamó Toothless para que se concentrara.

La bestia sacudió la cabeza, inhaló y exhaló profundamente antes de responder.

—Invasores, ¡Kiba! —respondió resumidamente. —Los centinelas que custodian dicen que no viene solo con los lobos tiene a otras criaturas de su lado, y es obvio que sus intenciones son las de apoderarse del castillo. ¡No debemos permitirlo!

—¿Cómo los atacamos? —preguntó Lavander chocando sus puños, había llegado a tiempo a la junta con Kaiser, Bo y Sir Allard.

—¡Hay que organizarnos, cuidar las entradas! —explicó Astrid tomando el liderazgo como toda buena líder. —¡Haremos equipos!

—Te escuchamos BestiAstrid. —dijo Toothless ansioso por pelear con Kiba de nuevo y de probar la nueva ala que Hiccup traía con él.

—¡Stormfly y los nadders! —ordenó Astrid primero. —Cuiden el ala oeste... no permitan que nadie entre por ahí.