Batalla por el castillo pt4

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Este salió largo en compensación a la semana pasada, y porque ya quería terminar el asunto de la batalla, espero les guste.

Capítulo 20

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Batalla por el castillo Pt4

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En los interiores de los pasillos que daban a la cámara de las estatuas; Kaiser seguía enfrentándose al oso negro con garras y colmillos; este último era inmenso cuando se ponía en pie y propinaba buenas bofetadas, pero Kaiser no sucumbía a sus ataques y lo atacaba con una ferocidad tan desconocida para él y que nunca había tenido que utilizar cuando aún vivía bajo la protección de su padre, suponía que porque en aquel momento no tenía por quien preocuparse y tampoco una causa por la cual luchar; pero si se sentía un poco arrepentido debido a que le hubiera gustado usar esa misma ferocidad para salvar a su manada de su hermanastro Kiba.

La contienda parecía ir en un empate, el oso había logrado estrellarlo por séptima ocasión contra la pared; pero enseguida que se recuperó, Kaiser lo embistió y lo estrelló en el otro extremo, logrando que el oso se golpeara en la cabeza en el proceso.

—"Ya desmáyate" —pensaba mientras se trituraba los colmillos, no sabía por cuanto tiempo resistiría peleando.

Sin embargo, su plegaria no fue escuchada. El aturdido oso negro se empezó a levantar tambaleantemente, y cuando estuvo de pie de nuevo le gruñó amenazantemente, pero aquella amenaza no duró mucho tiempo pues enseguida cayó derrotado a sus patas.

El lobo negro sintió alivio al verse así mismo como el ganador de la contienda, más la batalla no se había acabado; podía escuchar que más criaturas venían.

—¡Kaiser! —escuchó la dulce vocecilla del hada detrás de él.

—¡Lavander! ¿Qué haces afuera? Ahí vienen más, deben ocultarse. —advirtió a todos ya que el hada iba acompañada del gnomo y del fantasma.

—Y tenemos una idea para enfrentarlos, ¡acompáñanos! —pidió el hada apresuradamente.

"¿Qué clase de idea?"

Kaiser apenas iba a preguntar, cuando unas sombras se empezaron a proyectar por los pasillos, símbolo de que más criaturas venían en camino.

—¡Andando! —apresuró llevando a todos de vuelta a la cámara de las estatuas.

Hada, gnomo, lobo, y fantasma se volvieron a encerrar en la cámara, golpeando la puerta al cerrarla lo que ocasionó que los visitantes no deseados quedaran advertidos de su presencia.

Estos eran unos zorros, osos y lobos más pequeños que sigilosos caminaron por el pasillo para hacer de las suyas; recorriendo el pasillo que había sido testigo de la anterior batalla, uno de los pequeños osos que iba al frente se asustó ya que vio desmayado al oso que conocía por ser uno de los líderes de su raza.

—¿Creen que sea buena idea? —preguntó nervioso al verlo totalmente noqueado.

Sí, vamos. Escuché ruidos por aquí, sigamos. —respondió el zorrito líder restándole importancia al desmayado oso.

—¿Quién habrá hecho esto? —se preguntó uno de los lobitos que también iba al frente, ya no le estaba gustando mucho el plan.

Pese a las contrariedades que sentían algunos con el plan; los visitantes siguieron recorriendo el tétrico pasillo hasta que llegaron a la puerta de la cámara de las estatuas, donde se detuvieron por mera curiosidad y también con las ganas de entrar para hacer uno que otro destrozo.

El herrero y la bestia (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora