Hace siglos Tougo Sakamaki y el Señor de los Demonios sellaron a los primera sangre en su propio castillo dejándolos pudrirse poco a poco a través de los años. Esto, gracias a que eran los únicos (supuestamente sospechosos) de portar y ser el ori...
Estábamos a solo una semana de entrar de nuevo a la escuela. Y la verdad es que eso no me fastidiaba en lo absoluto ya que no era uno de mis mayores problemas. Hoy era la víspera de año nuevo y desde mi cumpleaños todos tenían algo en mente....algo que no se había llevado a cabo en la mansión Sakamaki desde que tengo memoria.
-¿Un viaje?- pregunto Yuma.
-¿Por que no?- dijo Laito, estábamos en el comedor terminando la cena.
-Tenemos una casa de playa en X - dijo Reiji acomodándose las gafas.
-¿Bueno por que no?- dijo Kou con una sonrisa en los labios.
-Creo que a Gavriel le gustaría conocer la playa...-hablo Kanato mirando al lobo.
-No e pisado ese lugar desde que era niña...- le sonreí a mis hermanos.
-Ninguno de nosotros- me respondió Shu mirándome.
-¿Bien y cuando partimos?- Dijo Ayato.
Después de aquello no tardamos en hacer unas cuantas maletas para que un familiar las recogiera en el salón y las metiera en la limusina.
-¿Pero valla que nos hacia falta salir de esa casa!- Dijo Ayato a un lado de Yui.- ¿Dime Yui tu no has estado en X?-pregunto mirándola, me había dado cuenta de que todos habían cambiado su actitud respecto a ella, eran menos mierda.
-La verdad es que no... cuando estaba con mi padre siempre íbamos a la ciudad o nos quedábamos en la iglesia...-respondió con las manos apretadas en los muslos.
-Pero que aburrida- dijo Kou, y después de esto lo acompaño un silencio.
Estaba algo lejos de nuestro hogar así que todos o estaban en lo suyo o platicaban unos con otros, de cierta manera era reconfortante, mis hermanos por fin siendo lo que eran... adolecentes/jovenes, y actuábamos como tal, se sentía un aura completamente diferente, y en lo profundo de mi me preguntaba si esto se debía que cierta humana estaba con nosotros.
Cuando llegamos la casa era obviamente mas pequeña que la mansión y Reiji nos había comentado que no se maltrataba ni se llenaba de polvo gracias a que contaba con un hechizo simple. Cuando ya nos habíamos instalado en la casa, todos nos reunimos en la parte de la sala.
-Bien, el lugar es grande así que...-decía Reiji pero se vio interrumpido por Yuma.
-Si si, no nos perderemos mamá...-dijo entre risas. Subaru, Kou, Ayato, Ruki y Laito rieron con él.
-Todos podemos ir a los lugares que queramos pero no olviden el toque de queda para volver a la casa...-dijo de nuevo Reiji.
-Y así festejar todos juntos- dijeron al unisono Kou y Laito.
Todos tomaron su rumbo, Kou y Laito fueron al pueblo a conquistar "bellezas" como las llaman ellos, Reiji, Ruki y Kanato decidieron ir al viejo castillo en el centro, Yuma Subaru y Azusa decidieron ir primero a la tiendas y luego al castillo, mientras que Ayato, Yui, Shu y yo fuimos juntos al pequeño parque de diversiones.
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