still here? - meglo

third.

—Hola amor como estas, llamaste en el mejor momento —le decía a Milo.

—Hola cielo, por que, pasa algo? —preguntó Milo.

Ahí mismo caí en cuenta que no podía decirle a Milo sobre Christian, entre nosotros nunca ha habido secretos pero esto es algo que no le he contado a Milo.

—Si amor es que estamos en un restaurante con temática de Francia y como no me habías contestado el ultimo mensaje me había preocupado por que quería contarte todo —Decía con seguridad.

—Ah vale, cuéntame todo cielo —Dijo Milo.

Hable más o menos veinticinco minutos con Milo, termine mi llamada y me levante de una banca en la que estaba y volví hacia la mesa donde estábamos todos.

—Otro novio Lya? Que paso con James? —Dijo Christian.

—Acaso lo que hago y dejo de hacer te lo tengo que contar? Por favor bájate de esa nube —dije en un tono un poco agresivo.

Tomé mi cartera y le pedí a los chicos que nos fuéramos ellos aceptaron, coloque mis audífonos y salí del lugar, fui la primera e iba sola, tenia muchísima rabia.

Estaba a punto de bajar las escaleras eléctricas cuando sentí que me tomaron del brazo, era Christian.

—Ahora si podemos hablar nosotros solos

—Que quieres? Te pedí que nunca en la vida me dirigieras la palabra, o que volvieras a aparecer en mi vida —dije soltandome.

—Solo te digo que esto no quedará así, me hiciste mucho daño —alzaba su ceja en tono amenaza.

—Por Dios Christian terminamos hace años, supera eso —le grite

Sophie y Henry llegaron en ese momento.

—Pasa algo Lya? —preguntaron.

—No, el ya se va y no volverá —señale a Christian.

El bajo las escaleras primero que nosotros, Sophie me abrazo por que había alcanzado a escuchar algo de lo que me dijo Christian.

—Sophie tengo miedo —le dije.

—El no hará nada, solo manten firme la relación con Milo y cuéntale todo el te entenderá, Milo sabe todo, no? —Me pregunto.

Al negar con mi cabeza Sophie me soltó y me dio una pequeña charla mientras bajábamos las escaleras eléctricas. Al llegar al auto ella se fue en la parte de atrás conmigo.

Toda esta situación me recordó al año pasado con James, él dolor que me causó y no quería que se repitiera.

Iba abrazada con Sophie hasta que rompí en llanto, tenia tiempo de no llorar pero era Milo y lo que le pasará a él me pasaba a mi.

Llegamos a casa y me despedí de los chicos y subí a mi cuarto. Le escribí un mensaje a Milo, el mensaje comenzaba con un "perdóname, creo que no mereces no saber esto" continuado de todo mi pasado con Christian. Al final tenía un te amo y un discúlpame.

Me levante de la cama y me dirigí hacia el armario, saque el buzo que era de Milo, me lo coloque y me acosté de nuevo en mi cama cerré mis ojos y me quede  dormida.

Narra Christian

Lya piensa que tratandome mal frente a sus amiguitos se va a librar de mi, pero no, nunca va a suceder. Y ya tengo todo para hacerla sufrir así como yo sufrí por ella cuando aceptaba ser la novia de James.

—Aló? Hola Alex.

—Hola Chris, como vas baby?

—Muy bien pero voy al grano, estas viviendo aun en Francia?

—Si, si, pero estaba pensando devolverme a Memphis.

—Pues, no lo harás, conoces a Milo Manheim verdad? El guapísimo novio de Lya.

—Obviamente esa estúpida se ganó la lotería con él, es tan hermoso, lo he visto en varios partidos y aggg.

—Está bien, te tengo un plan, pero tienes que cumplirlo a la perfección o ya sabes las consecuencias.

—Acepto cualquier plan.

Listo con Alex en el plan ya tengo todo en mis manos, Lya sentirá todo lo que es tener el corazón partido en mil.

Ese día como olvidar ese amargo día en el que Lya le dijo que si serian novios a James, maldito día.

Mi única salvación fue largarme de esa maldita ciudad y tratar de olvidarla, tuve una novia la cual termine a la semana por que Lya no salía de mi mente, pero creo que esto ya pasara con todo lo que tengo planeado.