Capítulo 13: ¿Número desconocido?

7.3K 474 14
                                    

El olor dulce de chocolate, se apodero de sus fosas nasales, causando que su cuerpo involuntariamente se estirará, tomando una posición sentada, usando sus manos para quitarse lo restante del sueño.

Su celular sonó segundos después, como si hubiera presenciado que estaba despierta, está estiró la mano derecha para tomarlo de la mesita de noche, y con la otra arrastrando un mechón de su pelo azul desteñido, hacia detrás de su oreja.

Bebé hermoso 😍

Buen día amor, espero que hayas descansado, escríbeme tan pronto veas el mensaje, tengo que hablar contigo de algo.

Poché levantó una ceja, pero antes de poder entrar al chat, una ola del olor a chocolate la volvió a invadir, colocando el móvil al lado de ella y levantándose de la cama, arrojando las sábanas hacia el borde, a punto de tocar el piso. Se dirigió al baño, lavandose los dientes y tomando una ligera ducha.

«¿Que quería Juan?» Pensó mientras se secaba la cara con la toalla, antes de salir de la habitación – No pienso perder mi tiempo hoy pensando en él, tengo cosas mucho más interesantes – Comentó en voz alta, buscando en sus cajones ropa.

Decidió en escoger un sostén negro, con una camisilla blanca, que tenía escrito *Girl power* en turquesa, unas bragas del mismo color negro, y un pantalón, azul oscuro, amarrado en los lados con un cordón, finalizando en ponerse unas tenis blancas y turquesas, seguido de un maquillaje simple.

Está al finalizar de vestirse, se encaminó hacia el primer piso, donde provenía aquel olor que le estaba abriendo el apetito. Al entrar a la cocina se encontró con Calle, quien ya estaba vestida, con una camisa negra, abierta en la parte trasera entre líneas, un pantalón blanco, con rasgados sultidos desde la cintura hasta el tobillo, y unos tenis rojos.

– Buen día dormilona – Calle comentó guiñandole un ojo, antes de colocar el panqueque de chispas de chocolates en un plato de cerámica.

– Buen día – Poché contestó tomando asiento en el taburete, recostando sus codos de la isla, mientras observaba relajada lo que hacia su compañera.

– ¿Dormiste bien? – Preguntó Calle, tomando dos vasos de cristal, y colocándolos al frente de Poché, para así proseguir hacia la nevera.

Poché asintió lentamente – Estupendo, y también tuve un sueño bonito – Comentó tomando el tenedor en sus dedos.

Calle levantó una ceja, con una media sonrisa y camino de nuevo a donde la chica con un pote de jugo.

– ¿Me lo contarás? O ¿Simplemente lo comentastes para dejarme con la intriga? – la castaña preguntó en tono juguetón.

Poché en ese momento tuvo varios *flashbacks* del sueño, causando que sus mejillas se tornaran un poco rosadas, llevando una mano a la cabeza para rascarse.

– Sabes algo, se me ah olvidado – Está río incómodamente, echando un bocado a su boca, y señalandolo, mostrándole a esta que no podía hablar.

Calle dejó salir una risita a esta acción, y inevitablemente una sonrisa estupefacta se le quedó en los labios, a los que sus ojos seguían pegados a la peli-azul.

– Si me sigues observando así, harás que me ponga nerviosa – Poché comentó, bajando el tono de su voz, mediante cada una de las palabras escapaban de su boca, haciendo que la última fuera hecha como un chillido.

Calle asintió, y termino de comer su desayuno, colocando el plato y el vaso en el fregadero, para enjuagarlos. Luego de terminar, camino hacia el sofá tirándose en este, y prendiendo el televisor.

– Iré a buscar mi celular, que lo eh dejado arriba, ahorita vengo – Poché comentó alto, para que Calle escuchará a lo que está solo levantó el pulgar sin despegar la vista de la pantalla, y se en camino hacia las escaleras, dejando a la castaña sola.

Luego de unos minutos, está se sobresalto al escuchar el sonido de su móvil, lo saco de su bolsillo y observó el ID, que leía Desconocido.

Con curiosidad, desbloqueo el móvil y activo el chat, viendo el mensahe completo.

Desconocido:

Hola princesa, sé que hemos llevado tiempo desde la última vez que hablamos, pero déjame decirte que te extraño demasiado. Sé muy bien que no has cambiado el número, y que estoy enviando esto a la persona correcta. Además quiero aclararte que por estar buscando polvo, me eh perdido al diamante más bello de mi vida. Espero que contestes rápido.

Calle leyó el mensaje con extrañeza, y lo releyó para dejar entrar y analizar bien lo que estaba leyendo, a lo que a pocos minutos decidió contestar.

Calle:

Amigx, no se que es la que te traes, pero no tengo ni la menor idea de quién eres, ¿Estás seguro que no es el número equivocado?

Luego de enviar el mensaje, se quedo observando la pantalla por unos segundos antes de que la voz de Poché, la cual hizo que su corazón diera una vuelta del susto, la sacará de sus pensamientos.

– Calle vamos, o piensas quedarte todo el día ahí sentada, ya no quiero que uses mi ropa – La peli-azul comentó en un tono burlón.

– Ah, esto, claro ya voy – Calle contestó un poco desorientada, apagando el televisor, y levantandose del sofá, dirigiéndose a la puerta, antes de frenar de golpe – Dame las llaves – Dijo sería, extendiendo la mano.

Poché levantó la ceja – No pienso dejar que guíes mi auto – Poché comentó dejando una risa burlóna escapar.

La castaña no hizo ni el aguaje de reír – No estoy jugando, no pienso ir contigo si guías, y tampoco creo que tu quisieras seguir viéndome usar tu ropa – gruñó, a lo que en ese momento le llegó un mensaje.

Está aguanto su argumento, levantando una mano en señal de que esperara, seguido de esto leyó el mensaje.

Desconocido:

Eres Daniela Calle, estoy seguro de eso. Soy yo Drake, tu  ex novio, no esperaba que eliminaras mi número de tus contactos. En verdad quiero verte de nuevo, y intentarlo otra vez, te prometo que eh cambiado.

El Arte De Cupido - Primer Libro - [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora