11. Profesor Styles

9.7K 421 148
                                    


Un mensaje hace que me levante del sillón.

"Estoy afuera, profesor"

Sonrío por las ocurrencias de esta chica y salgo de mi casa. Acepté pasar el tiempo con Sophie hoy porque estoy muy aburrido solo. Además, así estoy con ella un rato y me divierto.

Los niños me gustan bastante. No me tratan por ser "Harry Styles" sólo actúan conmigo siendo Harry.

Una vez que he salido de casa, camino hasta el auto de Sophie saludándola con una sonrisa.

—Buenos días... —canturreo abriendo la puerta y subiéndome al vehículo.

Miro rápidamente su vestimenta: unas leggings, una playera celeste y unas zapatillas tobilleras negras.

—¿Listo para tu primer día de voluntariado? —respondió con diversión arrancando el auto.

—De hecho, no. Nunca he hecho eso —confieso.

Pero era verdad, desde pequeño había cantado, nunca me pidieron en la escuela hacer esas cosas. Y yo como persona no tenía tiempo.

—Bueno, ahora aprenderás a trabajar sin que te paguen y lo hagas sólo por corazón —dice mirándome por solo un segundo antes de regresar su mirada a la carretera.

Consideraba a Sophie una gran chica. Podía ser yo mismo con ella sin preocuparme de que dirá la demás gente.

Mis mánagers no sabían de lo que estaba haciendo y la verdad, tampoco quería que se enteraran. Esto iba por mi cuenta para ayudar a una amiga.

Después de unos minutos en silencio, nos detenemos en un semáforo rojo. Sophia teclea la pantalla de su teléfono un par de veces, luego la radio, y finalmente a mí con una gran sonrisa.

No entendía qué tramaba, pero ese gesto no era buena señal. Mis manos se dirigieron a mis orejas cuando las tuve que cubrir por la fuerte música cuando radio explota a todo volumen reproduciendo Kiwi.

«¿¡Que caraj...!?»

La música seguía sonando altísimo. Lentamente dejo caer mis manos sobre mi regazo y giro mi cabeza para ver a Sophia con mi ceño fruncido.

—¡Vamos, Harold, hay que despertarnos! —grita bajando las ventanas a nuestros lados.

Ella estaba loca.

She's driving me ¡Crazy! —exclama balanceando exageradamente su cabeza de izquierda a derecha al ritmo de la música.

No sabía si reírme o bajarme del auto asustado. Esta chica estaba demente Era tan espontánea, no le daba miedo lo que hacía. Era fuerte, atrevida. Le gustaba vivir cada momento y eso me intimidaba... en el buen sentido.

El carro vuelve a avanzar cuando el color del semáforo cambia a verde.

—¡I'm having your baby! —ella sacó su mano y señaló al auto de al lado sin vergüenza alguna.

Me reí de su acción y decidí que no pasaría vergüenza sola, así que me uní a su horrible cantar:

It's New York baby always jacked up —canto fuerte.

Su cabeza se voltea en mi dirección al escuchar mi voz con la suya. Sophie sonríe aún más por eso y levanta un brazo, golpeando el techo del auto al compás.

It's none of your, it's none of your —canto imitándola y levanto las manos bailando.

Otro semáforo nos detiene justo en la parte que la batería suena. Sin saberlo, ambos movemos los pies zapateando el piso al compás. Reímos de la coordinación y seguimos.

More than FanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora