More than Fan

16. Almuerzo

Tapo la olla con la salsa lista y camino despacio a la sala donde provenían las risas.

-"...es que ¿Te lo imaginas?- Sophia se carcajea. -Todos los niños estaban: 'profesor Harry'- imita a los pequeños.

Mamá se ríe haciéndome sonreír a mí también. -¡¿Y te llevó a modelar?! ¡Está loco!-

Me adentro a la sala llamando su atención. -Me voy unos minutos ¿y ya están hablando mal de mí?- bromeo poniendo mis manos sobre mi cadera como jarra.

-It's none of your business- canta mi propia canción defendienose.

-Ohh... esa estuvo buena Soph- mamá la apoya riendo.

«Ya son amigas. Genial, me harán la vida imposible»

-La comida ya está lista, ¿O también van a hacerme bullying juntas en eso?- reclamo mientras ellas se ponían de pie.

-Exagerado- Sophie me da una sonrisa pasando por mi lado. Mamá se le une y caminan al comedor.

Se caen demasiado bien. Van a torturarme unidas. Cuando una no esté, lo hará la otra y así. Estoy frito. Para que las junté. Me condené a mi mismo. De esta ni los vengadores me salvan.

Vuelvo a la cocina y sirvo tres platos. Mamá es una gran mujer, y me agrada bastante que se lleve bien con Sophia. Ella se ha vuelto alguien muy importante para mí en tan poco tiempo.

Camino al comedor donde estaban ellas esperando mientras hablaban.

-...¿Te imaginas si nunca hubiera ido a la audición?- mamá exclama golpeando la mesa.

-Wow, sí, muchas cosas hubieran sido diferentes- Sophie se da cuenta.

Mamá iba a hablar cuando me ve entrando con los platos.

-No, no, sigan, quiero escuchar que dicen- bromeo colocándolos frente a ellas.

-Esto se ve muy rico...- Sophie suelta mirando su comida.

-Lo está, creeme. Vas a querer casarte conmigo para cocinarte esto todos los días- exagero mirándola.

«Bueno, ella quiere casarse contigo desde que tiene catorce, ¿Recuerdas?»

-No tengo problema, eh...- me sigue el juego con una sonrisa relajada.

Me siento en la cabecera de la mesa con cada una a mi lado. Espero con ansias ver sus caras al probar mi comida.

-Esto está muy rico- Sophia halaga señalando su plato y con la otra mano se tapa la boca llena al hablar.

Yo doy una sonrisa de satisfacción y volteo a ver a mamá.

-Aprendiste muy bien.- deja el tenedor a un lado saboreando los tallarines. Y así era. Ella me enseñó este plato cuando era más joven. Creo que es el único que se cocinar, pero shh.

-Gracias, gracias. Sé que lo hago muy bien, no hace falta aclarar- juego egocéntrico girando los ojos.

Todos empezamos a comer y a los pocos minutos yo rompo el silencio.

-Soph- llamo su atención y también la de mamá.

Ella hace un ruido con la boca indicando que siga. -¿Que vamos a hacer por tu cumpleaños?- frunzo el ceño viéndola.

El próximo viernes, ella cumplía veinte años. No se la iba a pasar en su casa encerrada.

-Ohh... Cierto, me olvidé- suelta una risita. -No sé, supongo que tendré un almuerzo en mi casa con mi familia y ya- alza los hombros sonriendo sin despegar sus labios.