More than Fan

59. Back for you

Esta semana ha sido una bomba.

¡Estoy demasiado alterada!

¡¿Se acuerdan de que Harold iba a ir a una fiesta de Halloween?!

¡El maldito se lució! ¡Me mandó cientos de fotos posando con aquel disfraz de John Elton y me dejó loca!

Ok... Dejando de lado mi obsesión fanática...

Toda esta semana he estado practicando al máximo para el desfile de mañana.

Han venido haciéndome pruebas de vestuarios cada tres días y Amanda y Steven se han puesto mucho más estrictos conmigo para lograr resultados muy buenos en mi cuerpo.

Con las semanas me fui acostumbrando a la rutina. Al comer más sano. Hacer mucho ejercicio. Ahora es un estilo de vida.

Mis piernas y brazos están firmes. Mi abdomen, cintura y espalda se han reducido. Estoy maravillada con lo que mi entrenador ha logrado en mí.

Entendí que no se trata de comer menos, sino de intentar comer mejor. Y no es bajar kilos, en cambio, quemar grasa, esas calorías acumuladas en tu organismo que se destruyen con deporte constante.

Me sentía sana y bien conmigo misma.

-¡Sophia apúrate!- mamá grita

También Sherri me dió una entrada de acompañante que se supone que es para Harry, pero él insistió en que se la de a mamá para que me vaya a ver y que él podía conseguir la suya.

Entonces aquí estoy... En medio areopuerto con todo el elenco de Sherri Hill. Modelos, estilistas, fotógrafos... Y mi mamá.

Para cuando llegara a Nueva York serían aproximadamente siete de la mañana, por lo que nos aconsejaron que tratemos de dormir en el avión para que cuando lleguemos, no perdamos ni un segundo y comenzaramos con el trabajo desde temprano.

Me sentía extremadamente nerviosa. En el fondo, muy fondo de mí, sabía que estaba preparada. Que podía con esto. ¡Pero eso no evitaba que sintiera que estaba apunto de colapsar!

Harry viajaría más tarde. Su vuelo solo demoraba cuatro horas... Él parece más ansioso que yo. Incluso me exigía y ayudaba cuando estaba cansada y con ganas de rendirme y no ir al gimnasio.

Por fin después de casi cinco torturosas semanas lo volvería a ver.

¡Es tan emocionante!

Siento esa sensación de cosquilleo en el pecho.

De saber que muchas cosas grandiosas van a venir y quiero que pase ya, pero a la vez no. Estoy sufriendo un transtorno de bipolaridad.

-Sophia, apaga el celular...- mamá vuelve a reprochar a mi lado, cuando mi teléfono suena.

Antes que la aeromoza pueda regañarme con las típicas reglas de que estamos a punto de despegar, abro los mensajes que me han llegado:

Harry

"Soph, sé que ya debes estar en el avión, pero aún así quería desearte buen viaje, linda"

"Mira, a mí me respondes, pendeja"

"Estaba dormido hace tres minutos, sólo me desperté por ti, ¿Como te atreves a no contestarme?"

"No me importa que estén volando, se cuadran en medio mar y me respondes."

"¡Sophia ya nos vamos a ver! No lo puedo creer"

"Ya no me acuerdo de tu rostro. ¡Hemos estado lejos un mes! ¡Es impresionante!"