More than Fan

62. ¿Una Cita?

-Yo no pienso ir.- Harry suelta severo.

-Harry yo no voy a bajar sola.- refuto cruzándome de brazos.

-Es normal que tú vayas, ¡eres una chica!- exclama con las manos en el volante.

-Vamos los dos.- propongo

-¡No! Si vamos los dos vamos a parecer una pareja de hormonados irresponsables que no pudieron esperarse hasta comprar un condón.- espeta moviendo las manos.

Me saca una carcajada y me tapo la cara. -Bueno es que eso pasó...- río acomodando mi cabello. -Ve tú y dile que es para tu hermana.-

Él me mira con una cara de querer matarme. -Si me reconocen y me toman una foto, las fans van a venir a preguntar que compré, y si se enteran, estoy acabado.- se excusa cruzándose de brazos.

-Harry... Ponte una gorra y lentes y nadie se va a dar cuenta que eres tú.-

-Si uso eso, van a pensar que vengo a robarles.- bromea. -Soph, sólo ve a decirles que quieres unas pastillas y ya. No es para tanto. No los volverás a ver otra vez en tu vida.-

Bufo quitándome el cinturón de seguridad del auto que Marcos nos había prestado. -Te odio...- gruño bajandome del carro.

-Te amo...- canturrea antes que le cierre la puerta de un golpe.

Camino hasta la farmacia con la cabeza gacha.

«Maldita sea, que horror»

Cuando entro al lugar, dos señoritas me esperan tras el mostrador. Sólo había una señora a mi lado. Gracias al cielo...

-Hola, ¿Cómo te puedo ayudar?- una de las muchachas pregunta.

Sí entendí eso, pero cómo le respondo...

-Hola... Umm... Yo no hablo español, pero... Oh! Un segundo- comunico sacando mi celular.

«Como odio a Harry en estos momentos. Estoy muerta de la vergüenza...»

Veo de reojo como un grupo de chicos ingresa al lugar. Se colocan tras de mí. Esperando su turno.

Entro en mi teléfono a Google traductor y escribo:

"¿Me podría dar unas pastillas de al día siguiente siguiente, por favor?"

Le muestro el celular para que entienda lo que le quiero decir. Ella lo lee y asiente con la cabeza. Se da media vuelta para ir a buscarlas.

Mi dedo resbala por la pantalla, presionando el botón del pequeño parlante. Haciendo que lo que escribí, se escuche en alto volumen.

Trato de tapar los parlantes de mi celular con mis dedos para que no se oiga. Los chicos atrás mío empiezan a reírse bajito.

Siento mi cara enrojecerse. Esta mierda no se calla. ¡¿Por qué no se calla?!

-Aquí está- dice mostrandome la caja. -Son 50 dólares- me indica señalando la pantalla.

«Jodida mierda, ¿Tan caro por solo dos pastillitas?»

«Definitivamente mataré a Harold después de esto»

Saco de mi billetera el dinero y se lo doy. Le recibo la boleta de cambio y tomo la caja dentro de una bolsa. Agradezco y camino a paso rápido saliendo de ese lugar.

«Dios Santo nunca más vuelvo a hacer esto»

Troto hasta el auto de Marcos y toco la ventanilla de copiloto. Harry me abre y yo ingreso echando humo de las orejas.