13. Pasarela

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Bienvenidos a clases de modelaje en un minuto con Sophie Evans.

Cuando yo veía los desfiles por YouTube, trataba de imitar a las modelos. Aprendí ligeramente: a caminar, sonreír.

Estás mostrando un producto, el fin de todo es hacer que el público lo compre. Hay que lucir la ropa. Jugar con ella. Verte sensual y coqueta con el tema. Caminar a paso acompasado. Rápido y seguro. Mirar en una sola dirección.

—Sophia Evans. Sigues tú. —Una voz masculina habla a mi lado.

Cuando me doy cuenta, estoy a los pies de unos escalones. Los subo y quedo atrás de otra chica apunto de pasar a la pasarela.

«Tú puedes con esto, Soph. Sabes cómo hacerlo»

La modelo adelante mío ya ingresó y yo soy la siguiente. El mismo hombre me hace una seña para avanzar. Es ahora donde sientes esa presión en el pecho, en el estómago, te tiemblan las piernas y tienes un nudo en la garganta.

Camino doblando a la derecha e instantáneamente una sonrisa aparece en mi rostro.

La pasarela parece más grande ahora. Las luces azules y blancas apuntan en mi dirección. Las sillas están llenas de gente. Camarógrafos, personas tomando fotos y otras solo mirando.

Empiezo a caminar al ritmo de una canción de Drake. Moviendo mis brazos al compás del balanceo de mis caderas. Jugando con la coordinación de mis hombros y pies.

Sentado en primera fila, veo a Harry viéndome con una sonrisa en el rostro. Empieza a aplaudir como si fuera una mamá orgullosa en la primera actuación de su hija

Ya entiendo porque las modelos siempre se ven perfectas haciendo esto. En casi el final del camino, hay ventiladores que hacen que tu cabello quede malditamente bien.

Llego al final de la pasarela y coloco ambas manos en mi cintura sonriendo. Bajo ambos brazos mientras nuevo mis caderas de un lado a otro. Me pongo de costado poniendo una pierna adelante de la otra. Doy una última mirada al público y camino de regreso por donde vine.

Puedo ver a Harry saliendo de su sitio, para seguirme por donde voy. Como estoy de espaldas, la gente no puede ver a dónde miro, así que concentro mi atención en Styles y sigo caminando de la misma forma que entré.

Harry tiene una sonrisa en su rostro gritándome cosas que no puedo escuchar por la música tan alta. Así que, cuando acabo, llego a una puerta parecida a la que empecé. Bajo los escalones botando todo el aire que había estado reteniendo y veo a Harry.

Corro como puedo con los tacones a abrazarlo, él inmediatamente me devuelve el gesto aún más fuerte.

—¡Sophia, lo hiciste genial, demonios! —grita separándose de mí.

No podía emitir palabra. Estaba en shock, estoy muy feliz.

—Evans, ven, vamos a cambiarte ya. —Una mujer tira de mí a un vestidor.

—Esta ronda es de Pink. Ya sabes, divertida, joven... Pero apurate niña que tienen que arreglarte —me regaña dando unas prendas.

¿Donde está Harry? ¿Arreglarme otra vez?

Esto debía ser una broma. ¿Iba a modelar para Pink? Acabo de modelar para lencería de Victoria's Secret. ¡Eso está de locos!

Me coloco una falda short muy pequeña, cortísima celeste con rosado. Un top amarillo con objetos dorados y unas zapatillas tobilleras celestes.

Me agrada y amo la idea de usar zapatos normales, así puedo caminar más tranquila y divertirme.

Me llevan al mismo camerino que estuve hace un rato y me quitan un poco de maquillaje, reemplazándolo por escarcha y brillos por el cuerpo.

—¡Tercera ronda! —un hombre con audífonos grita y todas empiezan a formarse.

Estaba pasando. Voy a vomitar.

Me alineo con las demás chicas esperando mi turno. Veo por una pantalla que hay aquí tras vestidores, que todo el ambiente ha cambiado. Ahora parece un mundo de caramelos. La pantalla muestra animaciones de colores.

Un hombre viene a mi lado y me entrega una paleta de plástico. Ya saben, ese caramelo de colores. ¿Se supone que debo salir con esto, no?

La fila empieza a avanzar. Así que, intentando respirar pausadamente y viendo que cada modelo estaba en sus asuntos, me enfoco en mí misma y en relajarme y disfrutar de esta sensación. Poco a poco se va acercando mi turno y, cuando finalmente me toca, el hombre de producción me hace una seña y yo me incorporo a la pasarela.

Camino con un aire más atrevido. Cuando llego al medio del camino, la modelo que regresaba me alza la mano para chocar los cinco. Le respondo el gesto sonriendo y doy una vuelta haciendo volar mi cabello.

Continuo andando moviendo los brazos y mis caderas. Estoy en final del recorrido y juego con la paleta de colores poniéndola entre mis dientes. Doy la espalda al público y nuevo mi cabello a un lado para que vean el gran "Pink" impreso en la parte de atrás del top. Señalo con mi pulgar el logo y con la otra elevo el dulce. Giro un poco la cabeza para despedirme y camino de regreso.

—¡¿Qué le hiciste a Sophia?! —Harry aparece en los escalones de salida gritando con una gran sonrisa.

Corro a abrazarlo y él hace lo mismo. Coloca sus brazos en mi cintura y yo escondo mi cabeza en su hombro.

—Estoy muy orgulloso y feliz por ti Soph —dice separándose de mí.

—Todavía no me creo que yo... —trato de hablar, incrédula.

—Lo hiciste Sophie. ¡Woo! —celebra, haciéndome reír.

Me acompaña a vestidores de nuevo. Después de tantos arreglos, nueva ropa y maquillaje, me dan un vestido rojo ceñido a mi cuerpo. Era la hora de la fiesta post- evento.

Todas se habían vestido igual de bellas, pero la mujer que me había arreglado, lo hizo tan bien, y no me siento para nada inferior a ellas.

Al salir del local, algunas personas me felicitaron. Incluyendo a Harry como diez veces más.

Subí con él a su auto y nos dirigimos al evento. Según yo sé, ahí hay fotógrafos y esas cosas ¿No? Trataré de pasar desapercibida, y espero que Hazz también lo haga.

El lugar se llena de gente a los minutos. El ambiente es cómodo, luces bajas decoran el local. Mesas de comida en las esquinas. Una barra de bebidas al medio y sillones en los laterales.

Estaba sentada al lado de Harry que conversaba con unos chicos. No me incomodaba. Solo es que estaba cansada. Veo mi reloj y me doy cuenta que casi son las once.

Observo a mi alrededor a las personas bailando y hablando entre sí.

Mi vida se ha vuelto mejor desde que conozco a Harry. Cada día tengo una nueva aventura y me divierto con él. Es una persona asombrosa. Con lo que ha hecho ahora es una prueba de lo maravilloso que es. Por que yo pude haber metido la pata, y el que se metía en problemas era él por recomendarme. No le importó que pudo pasar y se arriesgó por mí.

Lo que me causa cierto temor o preocupación, es pensar cuando él deba volver a su trabajo. A esa vida ajetreada y sin descanso. ¿Ya no lo volvería a ver?

—¿Sophie? —la voz de Harry me saca de mis pensamientos.

—¿Sí? —Giro mi cabeza para mirarlo.

—¿Quieres bailar?


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SOPHIA LO HIZOO!!!

*CLAPS*

Después de toda la felicidad, si nos ponemos a pensar... Harry se va a ir en algún momento. Sufran conmigo.

¿Creen que su amistad crezca? ¿Que la distancia los separe? ¿Que el gran Woody pueda cruzar el barranco? No se pierdan el siguiente episodio de las aventuras... Ok ya.

Haha siempre gracias por leer! <3

Les mando muchos besos.

~Val

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