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22. Llamadas y Sorpresa

Los cinco días que ya llevaba en Italia me habían servido para pensar mucho, los usé para afirmar que sentía una atracción bastante fuerte por Sophia.

¿Como me di cuenta? Comenzando por el hecho, que el día que la dejé en su casa después de su cumpleaños; Me pasé toda la noche pensando en diferentes escenas que pudieron haber ocurrido después de ese casto beso que le robé.

Fue un pequeño impulso que salió. Sentí la necesidad de hacerlo, y pensé que ese era el momento adecuado. El día de su fiesta, comprobé mi teoría de tal vez gustarle, al menos saber que se siente confundida conmigo, me trae ilusiones y esperanzas con ella.

Conozco a Sophie hace menos de tres semanas. No puedo estar en una relación con una chica en tan poco tiempo de conocerla, pero eso no justifica que se haya ganado mi amistad, y se había robado toda mi atención.

Después de eso, había pensado en ella todos estos días, al levantarme, mientras me tomaban las fotos, cuando estaba solo... Todas las noches nos llamábamos y contábamos como fue nuestro día. Moría por estar con ella ahora viendo una película juntos, en lugar de que me anden maquillando para posar en esta ropa rara.

Cuando hizo eso de tentarme con su cuerpo en la playa, confirmé otra de mis teorías: deseo a Sophia. No en la forma depravada de sólo querer tenerla en mi cama, sino en la forma de poder besarla, tocarla, hacerla reír con mis estupideces... Entonces es ahora donde  ustedes dirán: «¡¿y porque no lo haces, pedazo de imbécil?!» bueno, la respuesta es fácil.

Soy Harry Styles.

En algún momento volveré al trabajo, y cuando eso pase, para poder permanecer comunicado a Sophia, mis mánagers se deben de enterar. Y eso es precisamente lo que no quiero y he venido evitando todo este tiempo. Me debería importar muy poco ¿verdad? Ya es costumbre para el mundo que ande de chica en chica, pero no para Sophie, no me gustaría que ella pasara por todas las consecuencias que conlleva estar relacionado con alguien como yo. Por eso debo pensar muy bien que hacer con ella. No quiero que pase por medio de críticas, ni presión por parte de la gente.

Por ahora, tengo dos planes: el primero, es disfrutar lo que tengo con Soph en estos momentos, no voy a llevar a ligas mayores esta relación si sé que todavía no puedo mantenerla fija. Y el segundo es: mañana vuelvo a casa, pero Sophia cree que lo haré la próxima semana. Entonces, planeaba hacerle una broma. Contrataré a alguien para que sea un mensajero, esa persona le llevará un "paquete" sorpresa de mi parte. Ese "paquete" seré yo. ¡Soy un genio! A poco no ¿eh?. Me meteré en una caja, ella no tendrá idea, la abrirá y "¡tada!". Oh... Ya quiero ver su cara.

-Harry ya estás listo. Acompañanos, por favor- la chica detrás mío que acomodaba mi cabello, me avisa para ir a tomar la última ronda de fotos.

-Claro, dame un segundo- le respondo educadamente mientras saco mi celular para responder un mensaje recién llegado.

-¿Con qué disfraz te han vestido hoy?-

"Sophia"

Sonrío involuntariamente a la pantalla y le contesto de manera rápida:

-Me creen Dios, estoy todo de blanco, como mi alma, soy la pureza en persona-

Bromeo esperando su respuesta que no tarda en llegar. Era una nota de voz.

-Eres un idiota. Te van a despedir por andar con el celular en vez de trabajar- su risa me hace reír quedito a mí también. Decido grabarle un audio igual.

-No se atreven a botarme, pagan mucho por este cuerpo y rostro tallado por el mismo Miguel Ángel- exagero riendo.