-Necesito dormir- suelto en un quejido saliendo del salón de baile con Jasmine.
-Yo bañarme. Joder, esta clase sí cansa- dice empujando la puerta principal que nos dirige a la calle.
Acabamos de salir de bailar. Mis piernas duelen. Estoy exhausta.
-¿No trajiste tu auto?- pregunta caminando al suyo.
-No, mi mamá se lo llevó. Tuvo que salir- explico acompañándola. -Tomaré un taxi- me encojo de hombros.
-Bueno... Yo te llevaría, pero debo ir al gimnasio- hace un puchero disculpándose.
«¿Como tiene fuerza? Yo solo quiero ir a mi cama y comer helado para volver a engordar lo que he sudado hoy»
-No te preocupes, te veo mañana- me despido de ella y camino hasta una esquina de la avenida, mientras espero el taxi que pedí.
Mi celular vibra por un mensaje.
«Harry»
"¿Donde estás?"
Tecleo rápidamente cuando veo el carro estacionándose frente mío.
"Saliendo de clase. ¿Por qué?"
Subo al auto indicándole la dirección al conductor. Unos segundos después, mi celular vuelve a vibrar.
"No, exactamente dónde estás"
Ruedo los ojos ante sus caprichos y respondo:
"En un taxi, yendo a mi casa"
"Perfecto. ¿Puedes venir al parque gigante que está al lado de la universidad central?"
«¿Así toda sudada? Que horror»
"Conste que estoy hecha un espanto, pero sí"
Su respuesta no tarda en llegar.
"¿Y también puedes decirle al que conduzca que se se apure? Muero por verte ya"
Río por sus comentarios y bloqueo el celular. Le pido al conductor que me lleve al parque central y él cambia nuestra ruta.
Harry volvió sano y salvo a Londres hace unas horas. Pensé que nos veríamos en su casa más tarde, pero este chico me viene con una locura diferente cada momento.
Unas cuadras más y estoy en la entrada del gran lugar lleno de árboles y césped perfectamente pulido.
«ok... Y ahora donde se supone que esté Harold...»
«Harry Potter y el misterio de dónde está Harry»
«Buscando a Harry parte tres»
Me adentro en el parque caminando sin rumbo por unos minutos, cuando mi teléfono vibra de nuevo.
"Creo que ya te ví. Alza una mano"
Frunzo el ceño ante su extraña petición, sin embargo lo hago. La levanto sintiéndome como bicho raro y la bajo rápidamente como si hubiese hecho algo malo.
Lo busco con la mirada, mas no lo identifico entre tanta gente y niños corriendo.
"Sí eres tú. Maldición, ya me estaba olvidando de lo bella que eres"
Me carcajeo por su exageración y tipeo:
"¿Donde estás?"
"No vayas a gritar, eh"
Escribe y espero unos segundos. Cuando a mis espadas, un peso se posa en mi cintura haciéndome saltar.
ESTÁS LEYENDO
More than Fan
Fanfiction¿Quién dice que las casualidades no existen? Ella era una fan más obsesionada por el británico de ojos verdes. Él acaba de terminar su gira buscando un descanso y diversión. ¿Quién dice que los sueños no se cumplen? No es la historia donde la fan c...
