66. One Direction Reunion

8.5K 290 516
                                    

¡Hoy es el gran día!

¡No puedo creer que vaya a decir esto!

¡Veré a mis chicos juntos otra vez!

¡En la misma habitación, respirando el mismo aire contaminado!

¡Maldita sea, voy a conocer a Louis y Niall! ¡Voy a ver a One Direction juntos una vez más!

Son las dos de la tarde y debería estar almorzando. Pero en cambio, estoy eligiendo que ropa ponerme para esta noche.

Tengo mucha energía. Estoy ansiosa, emocionada, quiero llorar y gritar. ¡Estoy sumamente feliz!

-¡Sophia, ¿Vas a bajar a comer o no?!- mamá grita desde la planta baja.

-¡Comer es para los mortales, madre! ¡Voy a ver a One Direction!- exclamo asomándome al marco de mi puerta.

-¡Has repetido eso todo el bendito día! ¡Cállate ya!- Michael gruñe desde la habitación de al lado.

-¡No peleen!- mamá advierte desde su lugar.

-¡No tengo que ponerme!- chillo horrorizada al ver toda mi ropa exparcida por mi cama. No encuentro nada.

-¡Entonces lárgate a comprar ropa como lo haría cualquier mujer de tu edad!- Mike vuelve a gritar.

-¡Mamá iré a comprar!- aviso tomando mi billetera del cajón de mi tocador al lado de mi cama.

Bajo de prisa las escaleras. Encuentro a mamá colocando unos vasos sobre la mesa. -¿Irás así?- pregunta frunciendo el ceño. Señalando con insuficiencia mi atuendo: unos shorts rosados con un polo manga corta de Bob esponja y unas zapatillas algo gastadas que usaba dentro de casa.

-Es un país libre.- me excuso corriendo a la puerta de salida. Entro a mi carro y tomo mi celular con apuro. Busco entre mis contactos a la chica con más estilo que conozco: Jessie.

Uno... Dos... Tres timbrados hasta que me responde.

-Hago tarea, ¿Qué quieres?- me pregunta desde la otra línea.

«Tan linda ella...»

-¡Necesito ropa decente para ver a One Direction y todo el elenco de The X Factor! ¡Esto no es un simulacro!- exclamo prendiendo el auto, colocando mi teléfono entre mi hombro y la oreja.

-En el centro comercial de por tu casa. Voy para allá.- suelta severa antes de cortarme.

Respiro más tranquila y me pongo el cinturón de seguridad. Salgo de la cochera y pongo en marcha el carro.

Ayer por la noche había vuelto Harry de Los Ángeles. No nos habíamos estado tratando mucho por culpa de la diferencia de horario y nuestros trabajos.

Aunque el suyo sea mucho más pesado. El mío no se quedaba atrás.

En unos días salía la revista Vogue con mi entrevista y fotos. También hace una semana tuve una sesión de fotos con la marca de Sherri Hill.

Me avisaron que en unos días debía viajar a California para tomar nuevas fotos en un ambiente determinado y con ropa bastante veraniega.

Me entristece un poco el hecho de que justo cuando Harry vuelve, yo deba irme. Y lo irónico es, que me voy al lugar en dónde él estaba antes.

Pero como dice Hazz... Trabajo es trabajo.

Esta es la vida que elegí y me gusta. No puedo quejarme de absolutamente nada.

Los mensajitos repentinos de Harry no pasaban desapercibidos. Al levantarme veía sus mensajes de el día anterior, en que me deseaba buenos días, o me mandaba fotos contándome mediante gestos lo cansado que había sido su día.

More than FanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora