He salido fuera.
He pensado que quizás la mejor forma de aclararme sea perdiendome.
He dejado de hablar con la gente y he empezado a salir al congelador de mi balcón para volver a sentarme en él mirando las estrellas y a desahogarme solo con mirarlas.
Hasta ahora nadie me ha buscado,
Quizás porque he tomado la decisión correcta.
Sentada en una roca frente al mar me he encontrado infinitas noches de verano,
Con el fin de intentar entender por qué todos son cuerpos fríos deambulando en un mundo de cristal.
Y yo,
Entre ellos,
Me he sentido sola,
Sola,
Y con miedo de cortarme al doblar la esquina de alguna calle que me lleve al olvido.
He intentado sacarlo fuera,
Dejarlo pasear y que esto que siento se tome su tiempo en volver.
No he tenido éxito.
Me gusta analizar el comportamiento de la gente,
Hasta el más sencillo,
Para entender cómo piensa,
Cómo siente.
Pero desafortunadamente,
No me ha hecho falta un escaner ni una radiografía completa de tu vesícula para entender,
Que ya no hago falta aquí,
A tu lado.
Yo también me he cansado de ser un cuerpo de papel en vuestro mundo de cristal,
Creyendo que al romperme,
Siempre tendré celo de repuesto.
Me ahogo,
Y no tengo bote al que subir para respirar aire fresco,
Así que creo,
Que seguiré a la deriva en busca de alguna isla,
En la que sentarme,
Y sentirme
Libre,
Sola.
00:33
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Pasadas las 00:00
PoetryParanoias mentales a destiempo. A veces es necesario sacar algo bueno de un corazón dañado, así como escribir su historia recordándola de la forma más bonita que se merece un sentimiento. Parandose a pensar si realmente todo valió la pena, si tu pec...
