Quizás nunca nadie sea realmente consciente de lo que esconde un esbozo de sonrisa hasta que no se ve encerrado en un pecho donde las carcajadas son barrotes que encierran más y más cada esperanza de alcanzar la luz. Quizás lo que creías que era sostener en tus manos un destello de felicidad no era más que una ilusión óptica que en el fondo tus retinas necesitaban ver e inventar. Porque al fin y al cabo la vida es eso, apariencias que nos construimos jugando a ser diseñadores de fachadas bonitas para ojos ajenos, mientras sus inquilinos desde el interior van poniendo parches a cada grieta que se forma por los daños de los años disimulando un poco toda la mugre que les cubre desde dentro, intentando que no se cuele entre las grietas algún pellizco de como son y sienten en realidad por si algún otro huracán con nombre y apellidos entra y les echa todo abajo.
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Pasadas las 00:00
PuisiParanoias mentales a destiempo. A veces es necesario sacar algo bueno de un corazón dañado, así como escribir su historia recordándola de la forma más bonita que se merece un sentimiento. Parandose a pensar si realmente todo valió la pena, si tu pec...