"¿Estás bien?" me preguntó, a lo que yo sin prisa le respondí que sí.
Mientas mi corazón corría por mi pecho desesperado expulsando a cubazos todos los litros de agua que invadían mis arterias echandola fuera por mis ojos para no inundarse el pobre, otra vez.
"estoy bien" le dije.
Mientras mis retinas no dejaban de ver borroso y mis manos ya cansadas y con paciencia no dejaban de apartar de mis mejillas los goterones.
"estoy bien" le dije.
Y fue la mentira más dolorosa que mi boca recitó aquella noche.01:33

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Pasadas las 00:00
PoetryParanoias mentales a destiempo. A veces es necesario sacar algo bueno de un corazón dañado, así como escribir su historia recordándola de la forma más bonita que se merece un sentimiento. Parandose a pensar si realmente todo valió la pena, si tu pec...