Ya pasó el mes desde que vine a Montevideo. Comienzo a acostumbrarme a estar con Mercedes y Rosarkka en los recreos y estar con José a la salida. José y yo salimos juntos un montón de veces, sin sentir nada el uno al otro. Últimamente noto a José raro, medio despeinado a veces que salimos y cada vez que yo voy a su casa, él se desabrocha dos botones más de su camisa. Es algo realmente extraño. Además, comenzó a ponerse una colonia muy rica, la cual huele a lavandas. Es tan dulce José conmigo, que a veces me olvido que es sólo mi mejor amigo y comienzo a imaginarme que lo beso. Pero no. Siempre tiene que estar mi estúpido reloj que marca la hora que debo irme. En las clases, José me mira a mí y yo lo miro a él. No hablamos casi nada en clase, sólo nos miramos y nos sonreímos. Pero no pasa nada entre nosotros. José desde que salimos juntos comenzó también a ponerse camisas blancas y limpias y planchadas y calientes y todo. Con Rosarkka y Merche, llegamos a la conclusión que yo estaba enamorada de José y que se me nota en la cara cada vez que lo miro. Pero igual. José hoy me pidió para que yo vaya a su casa para hablar de un tema importante. Me pregunto cuál será.
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Niebla
General FictionMaría Sandra Yugatoski es una chica uruguaya de dieciséis años que no parece tener una vida del todo normal: su hermana gemela fue secuestrada de niña, sus padres tienen problemas económicos por lo que ella se tiene que mudar a Montevideo con su abu...