CAMINO A TU DESTINO ©️® (TERMINADA)

Parte 34:"Ella ya está en casa".

           

RICK

El viento golpea mi rostro mientras recuerdo todo lo que nos confesamos Dian y yo anoche y hace que la desee más y más, pensar que la iba a perder por mi estúpido problema de confianza no me tiene muy contento, pero ahora que lo pienso bien esto sirvió para confesarnos cuanto nos queremos y que no habrá nada ni nadie que nos separe incluso su padre.

Dejando mi motocicleta a un lado, veo a Javi y algunos de sus muchachos todavía a arriba de sus motocicletas.  Apago el motor y me deslizo, luego espero a que Eliot y Sam hagan lo mismo. Mientras caminamos hacia ellos, Javi y sus muchachos bajan de sus motocicletas y se encuentran con nosotros en el medio. A juzgar por la expresión de sus caras, no están más felices de estar aquí que yo.

No veo a mi hija, afirma Javi, lo obvio.

Sacudiendo mi cabeza, le digo lo que es. Te lo dije, hombre. Ella es mía ahora.

—¡Eres una mierda!, ruge, acercándose. Debería destrozar tu culo ahora.

Mis muchachos se mueven a su encuentro, pero yo levanto una mano para mantenerlos en su lugar.

Si haces eso, no creo que tu pequeña princesa este demasiado feliz.

Él inhala profundo, como si estuviera a punto de volar en cualquier momento.

—Bien, vamos a hacer negocios.

Oliver estaba detrás del envío que se perdió. —Tomando una respiración profunda, le digo todo lo que sé, incluida la mierda que Samanta nos contó.

Él se encoge de hombros y sonríe. —Ya hemos hablado de todo esto, y ya te dije que mi club no tenía nada que ver con el lío en el que estás. No estoy seguro de por qué estamos revolviendo esta mierda una vez más.

Está jugando al hombre grande ahora, pero no voy a aguantar su maldita actitud.

—Te estás olvidando, Javi, de tu confesión y me mencionaste que alguien podría haber estado usando uno de tus chalecos .

No me olvido de esa mierda. Sus ojos se dirigen al hombre que está a su lado antes de que vuelvan a mí. Si descubres que es de nuestro hermano perdido, házmelo saber.

Asiento, tratando de pensar qué decir a continuación.

Necesitamos hablar de una retribución. Tiene que haber algún tipo de venganza por a verme llevado a su hija, si descubrimos que su club no tiene nada que ver con nada de esto. Demonios, incluso tendríamos que pagar por a ver secuestrado a Mia también.

—Si descubrimos que tu club no estuvo involucrado, ni siquiera un ex miembro, estamos dispuestos a darles el veinticinco por ciento de nuestra compra del envío. Las palabras sabor amargo salen de mi boca, pero me obligo a decirlas de todos modos.

No quería darles una mierda, pero esa no era una opción. El veinticinco por ciento es lo que acordamos Sam, Eliot y yo. Definitivamente se recortará en los planes que tenía para el dinero, pero será muchísimo más barato que el costo de una guerra con el club de Los Satans Soldiers.

—¿Qué pasa si no tienes en tus manos las armas?, Pregunta Javi, con otra sonrisa en su rostro.

Se necesita toda la fuerza de voluntad que tengo para no meter sus malditos dientes en su garganta.

—Solucionaremos eso si no logramos rescatar nuestro envió.

"No, no lo haremos", dice, sacudiendo la cabeza. Solucionemos esta mierda ahora, o tendremos guerra en nuestras manos.