LA DOMA DEL ALFA

III

Noviembre 2018,
Manada "Luna Llena"

Zoe's POV

Casi estamos en Luna Llena. Casi estamos en mi luna...

— Debo irme Henry. No quiero que mis padres sospechen de esto. Paso de más broncas.

— Dame un beso antes de irte, bombón.

Me acerco a él y le doy un beso suave en los labios. Aprovecha mi postura recostada sobre él en la cama para atraerme aún más hacia él agarrando mi cintura desnuda hacia su cuerpo. Intenta profundizar el beso y yo me dejo. ¿Por qué no?

Empieza a acariciar toda mi espalda y noto como su ereccion crece contra mi vientre. Piel con piel. Ambos desnudos sobre su cama. Qué bien se siente...

Decido tomar el control, y empujo su hombro para que se recueste totalmente y quedar a horcajadas sobre el.

— Esto es lo que estabas buscando, ¿contento?

Sujeto sus manos por encima de su cabeza y empiezo a moverme encima de él, traviesa, aplicando fricción con mi feminidad en su parte más íntima. Suelta un pequeño gruñido y yo me muerdo el labio juguetona.

— Necesito más de ti, Zoe.

Sigo rozándome contra su cuerpo, buscando mi satisfacción mientras lo oigo emitir gruñidos entre placer y frustración.

— Te dije que me debía ir Henry, y no me hiciste caso - digo entrecortadamente.

— No me hagas esto otra vez Zoe, por favor.

— Shhh...

Verlo sudando y suplicando por su liberación me excita incluso más. Sé que me estoy portando mal con él, y eso me encanta. Así que sigo con mi movimiento de caderas, alternando entre círculos y simples sacudidas arriba y abajo, evitando en todo momento la penetración. Noto como un calor ardiente empieza a crecer en mi bajo vientre mientras Henry intenta zafarse de mi amarre en todo momento, pero no consigue moverme, soy mucho más fuerte que él.

— Gracias por este Henry.

Consigo decirle entre gemidos y le beso descaradamente mientras alcanzo mi clímax entre sonidos ahogados en su boca.

Me doy unos segundos para recuperarme y me aparto de él enseguida dirigiéndome a su ducha. Cierro con pestillo para que no pueda entrar aunque sé que no lo hará. Sé que se quedará tumbado mirando al techo dolido, pero él se lo ha buscado.

Salgo rápido de la ducha y me visto con mi ropa de antes mientras Henry me mira impertérrito.

— ¿Lo siento?

Le dedico una sonrisa torcida mordiéndome el labio inferior. En realidad me gusta mucho Henry, pero me permite demasiado en ocasiones...

— Eres una zorra Zoe, ¿cómo has podido dejarme así? Sabes que yo también ceno hoy en tu casa, ¿verdad?

Suelto una carcajada y le respondo coqueta.

— Date una ducha de agua fría y dejará de oler a frustración. Y de paso también a mí.

Le doy un pico en los labios y salgo por la puerta moviendo levemente mis caderas, como siempre, diciéndole adiós.