Capítulo 18

707 88 0
                                    

Lina me enseño el cadáver de la criatura, en efecto, ella lucho usando el alambre y sus puños.
La criatura había sido asfixiada usando el alambre, mientras se encontraba dentro del pozo, sin uso conocido.
Luego de acabar con ella la arrastro fuera de la cueva frente a los centinelas, tal vez para dar la impresión de que ellos le habían derrotado.
La apariencia de la criatura era similar a un gran lobo blanco, con un gran cuerno en su frente.
Viendo esa bestia, no podía comprender de que utilidad le fue el pozo, hasta que observe en sus patas traseras, el alambre enredado.
–Por su apariencia, diría que es ágil y fuerte, entiendo el punto de la dificultad, además de sus colmillos, si no llega a dar una mordida, su cuerno podría atravesar o rasgar sin gran dificultad, entiendo por que era una misión suicida.
Luego de analizar a la bestia, me faltaba un detalle, de ser pariente de los lobos, ¿Tiene manada?.
Lina escuchaba con atención mi explicación, mientras asentía sonriendo de oreja a oreja.
Supongo que mi análisis le gustó.
–¿Sabes si tienen manadas? De ser un solitario o errante, erradicar uno a la vez es la mejor opción, de no ser asi, hay que plantar unas trampas para llevarlos a nuestro ritmo.
Ella se sorprendió por mi idea, para luego refutarla.
–No creo que sea necesario, su raza es nómada y son muy solitarios, lo que hace que se encuentren seguido por esta zona, son las criaturas que comen, de las que... me salvaste...
Mantuvo silencio, lo que fue beneficioso para mi, ya que ideé un plan.
–Usáremos los que había derrotado antes como carnada, luego buscáremos algunos más con el mismo propósito.
Tras decir esas palabras ella quedo pálida.
Ese fue mi error, ir a buscar a sus captores, más allá de eso, la incluí en mis planes sin preguntar, ese es el peor error.
–Mi error, se que no debo incluirte en mi misión, lamento también decir de ir por esas criaturas.
Lina camino hasta mi, luego me abrazó.
–No podría estar más feliz de poder vengarme y ayudar a mi benefactor.
Dijo esas palabras luego me soltó de su abrazo, dejándome sentir la calidez de su cuerpo.
Se ve mejor, creo que es capaz de asistirme.
–Esta bien entonces, aceptare tu ayuda.
Luego de decir eso, comenzamos a hablar del plan y de su papel en el, no parecía gustarle mi metido de combate, aun asi acepto la idea, por ser algo nuevo para ella, aprender de su salvador, era algo interesante según sus palabras.
Fuimos donde el dia anterior había acabado con el grupo mayor, notando que faltaban algunos.
–¿Tú derrotaste a todos estos solo?
Entiendo su sorpresa, quien ve el campo de batalla, no esperaria una batalla unilateral.
–Si, también deje escapar a uno, de esa forma descubrí su base y luego te rescaté.
–¿Cómo es posible eso siquiera?
No entendí lo que decía, pero no se detuvo allí.
–Eramos varios combatientes, aun si ellos tenían a un mago, deberíamos haber podido vencer de tener un mago también.
Debía disipar sus preocupaciones ahora.
–Lo cierto es que use varias cosas para derrotarlos, por lo que debo obtener suministros, aun con ello, su líder y su mago, no estaban en esta batalla, de ser el caso, de casualidad lograría huir.
Lina me miró con sorpresa, derrote a once sin darles tiempo de actuar, por ello pude vencer, si demoraba un poco más, tal vez ya estaría muerto.
Decidí contarle como fueron ambas batallas, incluso le enseñé las armas destruidas y el sable que obtuve del jefe enemigo, ella se sorprendió aun más, ya que ese sable, era el arma de su hermana.
–¿Entonces lo tomaras de regreso?
Negó.
–No tengo necesidad de ello, esta en buenas manos.
Dándome una sonrisa refrescante.
–Gracias, lo cierto es que me hace falta.
Le agradecí sonriéndole también, a lo que ella se ruborizó.
Juntamos los cuerpos que estaban allí, ella los inspeccionaba un poco, a ver si eran útiles para el plan y también, observaba la causa de muerte.
–Es Impresionante como los derrotaste, puedo dar fe de que fue como mencionaste.
¿Parece que antes dudaba de mi? Bueno no es que me importe eso, yo dudaría de igual forma.
Luego de recolectar esos cadáveres, los llevamos a un sitio propenso a cumplir con las características para montar una buena trampa.
Volví a recordarle su papel y ella asintió.
Yo iba a luchar de frente, mientras ella interceptaba cualquier tipo de emboscada, esto ahorraría tiempo y recursos, ya que las trampas como seguro, no serán necesarias.
Dejamos los cadáveres allí y fuimos por el del líder y el del mago, para mi sorpresa, allí había una bestia con cuerno, devorando el cadáver del mago. Por alguna razón, su tamaño superaba con creces al que ella había derrotado, tal era la diferencia, que tres de ellos uno sobre el otro, quedarían apenas por encima de su tamaño.
–Demasiado grande.
Murmuró ella. Estando yo de acuerdo.
Aun asi iba a hacerlo.

Âme Noire - V. I (Isekai) (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora