Tinta negra

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Porque él es la razón de las lágrimas en mis libros, la única razón por la cual la tinta se ha corrido y lo que dice ahora es ilegible. Ese chico es la única razón de mis bloqueos porque es en lo único en lo que pienso ahora. Y los poemas que una vez fueron míos, vuelan a otras manos. Espero que encuentre en ella el personaje en la historia de su vida que yo no pude protagonizar. Porque ella tiene todas las características que a mi me faltan, todos los rasgos que pidió, todo lo necesario para que la historia avance.

Y una página que antes llenamos juntos, irradia corazones rotos. La historia que empezamos a escribir se quedó en un punto final. Sola me quedo, tratando de organizar los hechos que tanto daño me hacen. Ahora sólo soy una lectora, mirando de lejos lo que ocurre en esas páginas doradas. Mis ojos recorren una y otra vez lo que alguna vez fue real y ahora sólo es parte de mi imaginación, lo que una vez estuvo escrito y ahora se borra frente a mí. Las palabras que desaparecen con el viento y la sonrisa que se desvanece con la niebla.

Expectante, miro de nuevo las páginas de mis libros y recuerdo la razón por la cual están manchadas con tinta corrida. Porque sólo hay una razón para que ahora haya libros cubiertos de lágrimas, lápices con la punta desgastada, una página vacía y miles de borradores en el suelo, de historias sin terminar. Lo que dice en esos libros es ilegible y en lugar de descifrarlo ahora me deja escribiendo poemas antiguos en tinta negra. 

Trinos de atardecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora