¿Te quedarías a mi lado? {Caché}

Cap 23

-Sufriré más si no estás conmigo Poché.

-No, sufrirás más conmigo—Mis ojos se cristalizaron—En serio quiero estar contigo, pero no soy buena para ti, no sé lo que esa parte de mi hace, no sé qué te pueda hacer y no me perdonaría si algo te pasara—Le dije como pude, el nudo en mi garganta creció más.

-Poché mírame—La mire y me dijo—Yo quiero estar contigo, ya te dije.

-No, creo que es mejor que me vaya—Intente levantarme pero ella me agarro del brazo.

-No me vas a dejar, no de nuevo... No siendo tú—Me miró fijamente a los ojos, estaba luchando por no llorar.

-En algún momento lo haré y te sentirás mal Calle.

-Ya encontraremos una solución, pero por favor, no te vayas—Se acercó a mi cara., quería besarla, pero algo en mi me lo impedía.

-No me iré—Le dije casi en un susurro, mis ojos se posaron en sus labios y paso lo que tenía miedo de hacer y lo que había esperado tanto.

Sus labios se unieron con los míos y así comenzaron un lento y suave beso, era como si la dos lo fuéramos esperado desde hace tiempo y así era, era el beso que más añoraba y esperaba, estaba pasando, no era un sueño, era real y estaba con ella.

Cada vez el beso se iba intensificando más, nuestras lenguas se habían unido a esto, subí una de mis manos a su cara y la mantuve ahí, al quedarnos sin aliento nos separamos y pegue mi frente a la de ella.

-No sabes cuánto había esperado este momento Dani.

-Yo también lo había esperado Poché.

Me separé un poco de ella, tome sus dos manos, las lleve hacia mi boca y deje un pequeño beso en ellas

-Pero sigo teniendo miedo—Dije aún con sus manos unidas con las mías—Miedo de mi y de lo que pueda pasar.

-No va a pasar nada Poché—Se soltó de mi agarre y con un movimiento rápido me abrazo y me llevo a su pecho, comenzó a hacerme mimos en el cabello.

-Soy un desastre, no quiero que sufras por mi culpa—Repetí una vez más

-Shhh—Me calló— ¿Desde cuándo te pasa esto Poché?

-No sé, creo que después de la muerte de mi madre—Dije tratando de recordar—Al comienzo ni yo notaba que me pasaba, pero ya después uniendo todo, llegue a la conclusión de que sí tengo eso...

-¿No puedes contralarlo?

-Quisiera, pero no, esa parte de mi es la que tiene el control de eso.

-Tienen el mismo cuerpo, pero esto me hace dar cuenta que la personalidad de una persona es lo que la define... Son tan diferentes.

-¿Qué te hizo? ¿Qué te dijo? ¿Qué hice?—Pregunté curiosa, no sabía lo que esa parte de mi hacia

-Te vi con otra niña—Soltó un suspiro—Me quería dar algo, te miraba a los ojos y no era la misma mirada dulce y tierna.

-¿Mi mirada es dulce y tierna?

-Un poco sí—Sonreí al saber que ella pensaba eso de mi—Y cuando te hable, era distante, me dijo que le gustaba jugar, no sé a qué se refería, pero cuando me lo dijo sentí como si nada le importara

-No sé qué decir Dani, yo no sé que hace o que no.

-No es tu culpa, pero insisto en que deberíamos de buscar ayuda Poché

-Lo pensare, lo prometo

Así pasamos la tarde, abrazadas en aquel sofá hablando de cosas con y sin sentido, ningún tiempo a su lado era suficiente para mi, quería pasar todo el día y todos los días con ella y aunque me había dicho que quería estar conmigo, no sabía si ella podría soportar todo esto, todo el desastre que soy.