-¿Majo? Majo—Estaba llorando desconsoladamente recordando todo aquello, Daniela corrió hacia mí y se sentó a mi lado—Entiendo que no quieras hablar de ello—No me atrevía a mirarla—Pero no te vayas así—Me toco
-Nunca nadie me había visto llorando—Fue lo único que le dije y mi llanto aumento, la abracé y llore en su hombro—Fue horrible Daniela, no sabes lo horrible que fue
-Tranquila Majo—Me abrazó más fuerte y me hacía cariñitos en el cabello—No pienses en eso, no lo recuerdes.
-Es imposible no recordar como tu papá y un grupo de hombres abusaba de ti de todas las maneras existentes y tu escondías a tu hermana ocultándola de todos esos hombres porque tu papá es un maldito drogadicta que podía hacerle algo a ella—Como pude le dije, lloré aun peor, me abrazó aun más fuerte
-Majo, no tenía idea...
-Nadie tiene idea Daniela—Me separé de ella y sequé mis lagrimas—Llévame a casa, quiero estar sola
-Pero Majo...
-Solo llévame y te regresas con tu hermana. Quiero estar sola—Me levante y me recosté de la puerta del copiloto a esperar que volviera con las llaves del auto, mire al cielo y cerré mis ojos, llene mis pulmones de aire, solté. Necesitaba un cigarrillo en este momento, maldito asqueroso que les toco como padre, Daniela volvió y en silencio me monte en el auto, nadie dijo una palabra de lo ocurrido, su celular sonó y vi en la pantalla el nombre de Matu, puse lo ojos en blanco y volví mi mirada a la ventana, no contestó, sin embargo su celular repico unas tres veces más
-¿Qué pasa Matu?—Sin mirarla puse atención a lo que le decía—Estoy ocupada ahora. No Matu no puedo, estoy ocupada. Que no puedo ir Matu. Pero resuélvelo tú con ellos. ¿Sorpresa? ¿Qué sorpresa? Trabajen más bien. Bueno, bueno está bien, ya veré que hago pero no prometo llegar. No estoy molesta. No tengo nada tranquila. No estoy siendo grosera no seas babosa, solo que estoy ocupada. Ya ya, yo veré si llego, te aviso. Bueno...--Con eso colgó la llamada, permanecí aún en silencio, ya me estaba hartando esta tipa
-¿Irás arreglar tu problema matrimonial?—Pregunté aún sin verla, mordía mis labios
-No es un problema matrimonial Majo, me pidió que fuera un momento al salón...
-¿Te va a dar una sorpresita para que se arreglen?
-No seas boba, no entendí eso. Si quieres vamos ambas ahora..
-No—Dije—Quiero estar sola—Recargué mi cabeza en el cristal de la ventana, comenzó a lloviznar y veía las gotas correr.
-Está bien, si eso es lo que quieres...
**
Me dejo en mi departamento, suponía iría a su salón, no me despedí ni dije nada, ya en mi departamento, me quite los zapatos y los deje en la entrada, ya Vale debe estar por llegar, cerré la puerta de mi habitación y me recargué de la puerta lentamente baje quedando sentada en el piso con las rodillas en mi pecho, lloré sintiéndome un asco nuevamente, me voltee y fuertemente le di golpes a la pared hasta que sentí un poco de sangre correr por mis nudillo, los mire abrí y cerré un par de veces y di un último golpe, sostuve mi puño con la otra mano y volví a recargar mi espalda de la pared, de pronto una sensación de que me ahogaba me invadió, no podía respirar, puse las manos en mi pecho y mis intentos de respirar eran en vano. Inhalaba y exhalaba pero no sentí aire entrar en mis pulmones, cerré mis ojos y conté en mi mente mientras seguía inhalando y exhalando hasta que por fin logré sentir aire pasar por mis fosas nasales, normalicé mi respirar y seguí en el piso mirando mis nudillos.
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¿Te quedarías a mi lado? {Caché}
FanfictionMaría José Garzón, mejor conocida como Poché, una chica de 22 años, pintora; artista en ascenso, vive con su hermana Valentina desde sus 18 años, su padre Juan Carlos no fue muy bueno con ella luego de la muerte de su esposa, la madre de Poché, por...