Capítulo 21.- Destruida

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Ese día lo entendí y no pude dejar de llorar, mi padre no estaba con mi madre porque la quisiera, ni por nosotros, el solo estaba ahí solo por el apellido mi madre, por la importancia política que este le daba facilitándole ascender rápido en su trabajo, esas fueron sus palabras, mientras yo los oía discutir, entonces entendí la tristeza en Lena y Maicol, la tristeza de la que me querían proteger, entendí porque estaba distanciado de mi madre

El mismo lo dijo y sin resentimiento alguno en su voz, ya había conseguido de mi madre y de nosotros todo lo que él necesitaba, que ya no tenía razón para seguir acá, que el nuevo trabajo que le ofrecían, valía mas que toda su familia, cuándo la discusión termino y el salió de la habitación de mi madre, me vio solo dijo Que suerte que nunca más voy a tener que verlos, porque si por mi fuera, ninguno de ustedes habría nacido bestia para luego darme un fuerte golpe en el rostro que me tiro al suelo, yo no podía hacer más que llorar, mi familia se había roto

Recordé cuando le mostre mis notas, yo estaba feliz por conseguir la beca, pero su rostro más que de asombro y felicidad se veía fría y descontenta, ahora entendía, ahora entendía porque nunca quería divertirse un rato con con nosotros, mis hermanos me llevaron a mi cuarto y se quedaron conmigo

Mi madre estaba rota entre esto y la desaparición de mi hermano, pero ella no era alguien que sea daba por vencida, salió temprano al siguiente día, a buscar un nuevo trabajo, pues con el que tenía no le alcanzaba, ella estaba decidida hacer todo lo que fuera necesario para vernos felices, para darnos un hogar y dijo que ese trabajo extra nos permitiría mantenernos ahora que nuestro padre nos abandonaba, las cosas no iban del todo bien, pero ella estaba decidida a sacarnos adelante

Misterios del Mundo.- Lo que Parece No Siempre es lo que EsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora