Capítulo 37.- Charla de Hermanas

69 12 0
                                    

—Zuri podemos hablar —pregunto mi hermana ingresando a mi habitación, mientras yo hacía una tarea de biología.

—Claro Lena ¿que pasa? —pregunté volteando hacía ella, algo extrañada por su forma de hablar, tenía algo de misterio, duda o ¿miedo?, bueno al parecer no soy buena entendiendo esto.

—Zuri ¿recuerdas que estabas haciendo antes de que se desatará tu cambio? —pregunto algo incómoda he intranquila.

—Siendo sincera hermana no lo recuerdo ¿por que preguntas eso Lena? —cuestioné pues me pareció raro que lo preguntará, solté el lápiz que tenía en mi mano.

—Lo que pasa es que estoy preocupada por ti Zuri, no quiero que hagas algo de lo que puedas arrepentirte —habló acercándose a mi para abrazarme.

—No entiendo a que te refieres Lena.

—Lo que pasa Zuri, es que cuándo inició tu cambio estabas en la cocina y bueno cuándo en la mañana siguiente fui para sacarme algo para desayunar encontré un cuchillo tirado en el suelo.

Quedé hecha hielo por sus palabras, hasta ahora había supuesto que estaba ahí abajo, algo que mi madre me dijo, por haber ido a tomar agua o algo así, pues no sería la primera vez que lo hacía a mitad de la noche, pero ¿un cuchillo?, porque yo sacaría un cuchillo en la madrugada, tampoco es que suela usarlos, a menos que...

—No puede ser —declaré algo asustada, no podía haber pasado eso, habían pasado semanas desde la última vez que recordaba haberlo hecho.

—Zuri, tranquilizate, no vengo a juzgarte, solo quiero saber ¿qué fue lo que paso?, ¿y por qué? —puse mis manos en mi cabeza intentando recordar donde lo había dejado, donde estaba mi calendario.

—No puede ser que lo hay intentado hacer, no de nuevo —me levanté rápido para sacarlo tras recordar donde estaba.

—¿De nuevo? —preguntó asustada, mientras yo intentaba levantar el colchón de mi cama, en busca del calendario que ahi había dejado.

Era un pequeño calendario de una sola hoja, que había conseguido hace un tiempo, de unos sujetos que los fueron a regalar al colegio y en el que había decidido marcar las veces que lo había intentado, estaba arrugado y en el vi las fechas marcadas, confiaba en que no era posible, pero entonces encontre la fecha que buscaba, no estaba marcada, ¿eso significaba que no había pasado verdad?, si, no había pasado.

—No lo hice, me prometí marcarlo cada que lo intentará hacer y no esta marcado, significa que no pudo haber sido eso.

—¿Y si por el estrés del momento no pudiste marcarlo?

—No Lena, ya te dije que no fue eso, tuvo que haber sido otra cosa.

—Zuri, te dió el ataque en medio del acto, por primera vez me dices que no recuerdas que fue lo que paso...

—¡No! Lena, yo no quise hacer eso, es imposible, ¡no podría deberle la vida a lo peor que hay en mi! —le grité empujándola, estaba perdiendo el control, no podía, no podía haber sido salvada por la peor condena que la vida me dió.

—Zuri calmate —pidió con voz temblorosa pero delicada a la vez.

—¡Vete de mi habitación!, necesito estar sola —le grité, por alguna razón me estaba estresando muy rápido, no podía haber pasado eso, no, no podía ser esa la razón.

De pronto todo se volvió oscuro por un instante, sentí un impacto en mi espalda aunque no dolor—. ¡Zuri! —escuché el grito suave y lejano de Lena, para luego sentir como 2 manos me tomaban de la espalda, al abrir los ojos vi a Lena, movía su boca pero yo no escuchaba ningún sonido proveniente de esta...

Misterios del Mundo.- Lo que Parece No Siempre es lo que EsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora