Zuri
Finalmente llegaba el día, faltaban solo unas horas para que tuviera que enfrentarme a Carlos.
—¿Te encuentras bien Zuri? —preguntó Elías mientras caminábamos.
—Si me encuentro bien Elías, tal vez no estoy perfecto pero puedo hacer esto.
—Vaya, miren quién acaba de volver —se burló Carlos—. Pensé que ya no volverías.
—Todavía me necesitas, los cuatro reinos ya tienen un puesto, solo juntos podremos tener un puesto nosotros —expliqué.
—¿Te necesito?, tu me traicionaste —me reclamó, todos los demás que estaban practicando nos observaban.
—¿Retarte a un duelo y decirte tus verdades es traición Carlos? Tu eres el que se niega a justificar porque debe ser el líder.
—¿Y crees que tú te mereces ese puesto?
—No lo se, nuestro duelo no acabó después de todo —dije tragando saliva justo después.
—Si quieres un duelo, que así sea.
Explicó tomando posición.
Asentí y estiré mi brazo derecho hacia él, mientras usaba el izquierdo para cubrir mi rostro.
—Estoy lista.
Micke se puso entre nosotros para indicar el inicio del duelo.
—Según las reglas de duelo colegial secundario de la metrópolis de Nefer y de la ciudad de Lefelini, se da inicio a este reto de poder.
Carlos inició a atacar de manera rápida, yo opté por iniciar un cuidadoso retroceso, intentaba bloquear sus golpes retrocediendo de manera ágil y controlada.
Al atacar tan rápido, el se cansaría un poco, y a lo mejor así podría derrotarlo. Ese era mi plan.
—Ni siquiera tienes el valor para enfrentarme bien, y crees tener lo necesario para guiarnos —me acusó, no le respondí, la respiración era necesaria para garantizar la victoria al hablar de manera intensa en la pelea el solo lograba agotar su cuerpo al no permitirse respirar correctamente.
Finalmente di un golpe rápido contra él. Al haber estado a la defensiva todo el rato tenía la ventaja de que el no se esperaba mi golpe. Un golpe limpio a su cachete izquierdo.
El me miró enojado, ahora empezaba la verdadera pelea, ninguno de los dos era bueno defendiéndose, pero ambos sabíamos como lograr muchos golpes a nuestros oponentes.
Era una pelea de resistencia, quién podría resistir más antes de rendirse o caer. Pero había una alternativa más.
Pasaron varios minutos, lo sentí como si fuera al menos media hora, pero seguro fue menos, cuándo nos separaron, yo a penas lograba seguir de pie por el agotamiento y me costaba distinguir quiénes estaban frente a mí.
—Parece que hay un empate.
Sonreí al escuchar esas palabras, un empate era suficiente para mí, el estaba molesto, incluso sin mirarlo lo sabía, pues era obvio que si el duelo hubiera durado solo un minuto más el hubiera ganado.
—¡¿Qué dices Micke?! Solo mirala, ¡Apenas puede mantenerse en pie! —eleve mi cabeza sonriéndole victoriosa.
—Lo lamentó Carlos, pero todos conocemos las reglas del duelo, y Zuri resistió.
Tomó con su mano derecha la mano izquierda de Luis, y con su mano izquierda tomo mi mano derecha. Las levantó ambas a la vez mientras todos estaban rodeandonos, y dejando que nos alinearamos con el sol.
—Según las reglas de un duelo colegial secundario de la metrópolis de Nefer y de la ciudad de Lefelini, este duelo de poder a concluido en un empate, nuestros 2 miembros Carlos Axis y Zuri Lefel se han ganado el título de Reyes de nuestro reino colegial.
Había logrado mi objetivo, y sin necesidad de apostar mi última carta, varios nos felicitaron a ambos, entre ellos algunos, incluyendo Micke, me susurraron al oído "mi reina", ahora había conseguido lo que necesitaba.
No es necesario decir que me gané otro castigo por volver tan golpeada, pero no importaba, después de todo acababa de garantizar mi puesto en la sociedad.
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Misterios del Mundo.- Lo que Parece No Siempre es lo que Es
ПриключенияMi nombre es Zuri, y yo, bueno no soy tan normal como parezco a primera vista, la verdad es que fue una suerte que mis padres me pusieran al menos un nombre neutro, mi nombre completo es Zuri Ayleen Rain Lefel, y a pesar de lo que mi nombre apunta y...