Es sábado por la mañana me siento ligera y sonriente. En unas horas Yoongi aparecería en la puerta de mi departamento para llevarme con él hacía aquel baile prometido, ese al que me a invitado. Estaba también nerviosa porque no sabía el resultado del evento, esperaba desenvolverme bien frente a los invitados. Mientras tanto necesita reprimir esa sonrisa que abordaba mis labios porque la acompañante que tenía a lado estaba echando chispas por el simple hecho de ver un rastro de alegría en mí. Esperaba en los exteriores libres de un elegante edificio que Minji regresara de la reunión a la que ella debía asistir personalmente sin interferencia de un tercero en uno de las oficinas de la alzada construcción. Myeong estaba conmigo esperando tal como la primera lo dictó, la secretaria no estaba nada conforme con ello, me estaba tocando soportar su mal carácter.
—¿Por qué la señorita Jiwo me pidió quedarme aquí fuera? Podía haberle sido de más ayuda si esperaba allá adentro —se lamenta la muchacha a mi costado que no deja de tocar la punta de cabello, y echarme su peor mirada, me culpaba evidentemente de no haber podido realizar ese cometido.
—Hay un buen clima, el sol está brillando y los pájaros no se cansan de ir volando por ahí, no quería que nos perdamos de este buen clima—respondo, en realidad le había solicitado a Minji si podía esperarla aquí en este anexo exterior al edificio, ella accedió y envió conmigo a la pelinegra.
La secretaria arquea la ceja, dándome a entender que un el clima soleado le importa un comino, no es aquí donde quiere estar.
—Si no hubieras venido, yo podría estar allá adentro con ella —dice apretando lo dientes—. Estás arruinando todo para mí.
Voltea el rostro en otra dirección después de soltar aquello, su desconsideración hacia mí no la oculta cuando nos encontramos a solas, la a dejando en evidencia en cada instante que hemos coincidido en un mismo espacio sin testigos presentes, frente a Minji intenta fingir que puede manejar nuestra interacción con respecto e incluso así no logra su cometido, alguna mueca de desagrado la pone en evidencia. Quizá sí que le hice algo, estar de espectadora cuando estuvo a punto de ser despedida podía haber sido ese total quiebre de una posible cordial relación entre nosotras, recuerdo que antes de ocurrido eso y los cafés que le encargaron servir fueran puesto sobre la mesa ya era receptora de su antipatía, al parecer mi existencia era su problema.
Entrelaza las manos y mueve los dedos inquieta, está considerando soltar alguna otra cosa.
—Puedes decirlo, no te contengas —digo animándola a liberar aquello que su boca desea expresar, que arrugara su expresión y se tensara me agobiaba mucho más que algo que pudiera manifestar.
La pelinegra sacude la cabeza, mordisquea su uña al oírme, sigue considerándolo a pesar que le he dado paso libre para que dijera lo que quisiera, no debía temer que fuera ir con algún tipo de chisme que pudiera causarle dificultades, lo que quisiera decirme se quedaría entre ambas. A lo mejor creía que enserio lo haría y esta vez perdería su empleo.
—Desde que llegaste la señorita ni siquiera voltea a mirarme —anuncia al decidirse a revelar eso que mantenía en su pecho—. Realmente eres un maldito inconveniente, no me agradas nada —balbucea por lo bajo.
—No he venido para quitarte parte de tu trabajo o desplazarte. Minji te encarga muchas labores, sabe que cumples al pie de la letra lo que te manda —respondo. Myeong era demasiado dedicada a su trabajo es lo que me a demostrado estos días—. Estoy segura que se dio cuenta que haber tratado de despedirte fue un grave error.
—¿Sigues llamándola por su antiguo nombre? Ya nadie le dice así—señala inflando su mal humor—. Has venido ocupar un lugar al que varios esperamos llegar, y no hiciste nada para ganártelo. Eres una embustera.
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Love Letters 2《》 Min Yoongi (COMPLETA) ✔
FanficLos sueños, las metas, los proyectos se cumplen con esfuerzo y dedicación. Sin embargo el amor puede guardarse en el corazón, no olvidarse, puede incluso transformarse en uno más fuerte y maduro. Yoongi empieza a creer que el destino no es una tont...