Lo prometo con el corazón

#104

-Madre, Janet aquí están Diana y Taylor- habló Michael guiando a cada una a sus lados entrando a la amplia habitación.

-¡Oh! Señora Jackson, ¿cómo está?- habló una particular mujer, Liz, madre de Indivar acababa de llegar. -Señora Dima, no noté cuando llegó- confesó Michael, -está bien Michael- la mujer le sonrió lindo.

-¿Y...el Señor Dima?- preguntó dudoso, -uhm, fue en busca de mi hija, pidiéndole instrucciones a esa adorable ama de llaves- alzó Liz saludando rápidamente a Nina, que se encontraba a un par de pasos más atrás atendiendo a Taylor y Diana.

-Oh...uhm, ¿me disculpan?- alzó y emprendió su camino, a la sala próxima; ya algo nervioso, llegó, y ahí estaba el abuelo, sosteniendo a su nieta sonriente, junto a la mamá alado de ambos;, pero...al ver al autor de todo ésto, se le borró ligeramente la sonrisa, lo normal, un padre (Zac)protegiendo a su hija (Indivar)

-Jackson- soltó frío, y sintió la seriedad.

-señor Dima, ¿cómo se encuentra?- habló midiendo cada palabra.

-¡papi!- alzó feliz la niña desde los brazos de su abuelo.

-hola mi vida- dijo casi en susurro, moviendo su mano ligeramente.

-Creo que bien- respondió con los mismos aires, a lo que Michael no respondió, simplemente bajó la mirada.

-¡oh! ¡vamos Zac! No seas así con Mike, si no fuera por él, no tendrías a esa adorable criatura en tus brazos- habló Liz entrando a la sala.

-No lo creas tan lejano a ti Michael, Zac de verdad está encantado con Leire, y de algún modo agradecido- soltó sonriente tomándole del hombro.

-Tal vez, pero lo que no me agrada es que estén tan separados, éste no era el plan que tenía para Indivar- habló Zac.

-¡papá!- exclamó la joven.

-no...Indivar, él tiene razón...ni éste era mi plan inicial para ambos...-habló Michael, -yo quería llevarte al altar, pero...al parecer ésta adorable criatura se adelantó- dijo con una ligera sonrisa.

-Papi...¿qué es altar?- habló Leire.

-no te preocupes cariño, no es algo que te deba importar- soltó Indivar, llegando a su hija, ya que al parecer, esa pregunta no tenía idea de con que responder.

-Papás, si nos disculpan, Michael y yo vamos a presentar a Leire a los demás- completó, algo molesta, con las palabras de su padre, -bien- soltó el señor Dima, siendo tomado por el brazo de su esposa.

Al irse, la niña estiro sus brazitos a su papá el cual no tardó en llegar a ella, hacerle mimos.

-Michael, de verdad perdón por las palabras de mi padre, no sé en que estaba pensando en...-

-Oye, tranquila, está bien- alzó Michael con una linda, linda sonrisa.

-él tiene razón, y la debes tener tú igual, como ahora nos encontramos...no era mi plan...-completó.

-Ni el...-sola se cortó al suspirar, no compartía del todo ese pensamiento, por una parte, estaba agradecida de haber tenido a Leire, eso le hizo ver una parte de Michael que ella creía inexistente, o sea, que pudriera transmitir amor...

Volvía a su mente la razón por la cual se habían separado en el 91; traición, mentiras...(según lo que creía en aquellos tiempos)

Y le dolía...le dolía el creer que todo pudiera ser/sido una mentira...los sentimientos que decía tener por ella...

Pero al tratar con él aquella noche, donde demostraba su devoción al querer hacerse cargo, responder por Leire; le hizo ver algo en él...que...como se dijo, creía que no existía...