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-Mayo '99

Pasaban de los dos meses en el embarazo de Indivar, su equipo obviamente lo sabían, más no los más jóvenes, desde sus hijos, a algunos de sus amigos o cercanos...querían asegurarse que todo estaría bien.

Tanto así que Michael había decidido algo...

-cariño- emuló Jackson mientras bajaba las escaleras, por hoy, concluyó el ensayo ya estaba en casa y tomado un baño.

Indivar estaba en la sala, ella de igual manera había terminado de trabajar, disfrutaba mientras tenía a Leire a su lado con su peluche favorito y a Prince sobre su pierna, tomándolo por los costados.

-¿sí?- preguntó, mientras ya Michael entraba a la gran sala.

-¿Quieres algo en especial de cenar?- preguntó mientras se sentaba en la orilla del gran sofá, -¡pancakes!- alzó Leire mientras corría sobre los afelpados colchones para llegar a su padre.

-¡Oh! Leire mi amor no corras sobre el sofá puedes caer- la tomó en brazos tan rápido como pudo reaccionar al tenerla cerca.

-además, mamá debe decidir- le dijo a su pequeña en brazos mientras ella se acomodaba en ellos.

-Pues créeme si te digo que igual y si se me antojan pancakes- respondió Indivar mientras pasaba una mano sobre su vientre.

-oh ya veo- fue su respuesta entre risas. -¡quiero ayudar!- alzó Leire levantando sus bracitos al aire, en una enorme sonrisa.

-¿Leire, cariño vas a ayudar a Nina?- preguntó su madre desde el extremo del sofá.

-No, me ayudará a mi, yo haré la cena-alzó Michael. -¡pero Nina me deja añadirle chocolate a la masa!- refunfuñó la pequeña.

-¡Pero cariño debes de comer sano!- trató de excusarse. -¡Michael Jackson deja a tu hija comer chocolate!- regañó burlona Indivar desde su lugar.

-de acuerdo, ¡vamos!- se rindió a petición de su esposa. Y de segundos se levantó con su hija y entre saltitos fueron a la cocina.

-oh, amor, Michael, ¿podrías darme el biberón de encima de la barra de la cocina? Nina lo dejó ahí para que se enfriara un poco, por favor- pidió gentilmente mirando por encima del respaldo del sofá.

-claro, pero...¿no estará ya frío?- decía Michael mientras llegaba al biberón que estaba justo donde había señalado su esposa.

-¡ah no! Está...tibio casi caliente- respondió mientras lo tomaba en sus manos. -sí...es que lo calenté de más- respondió algo apenada mientras lo recibía en sus manos.

-¿qué? ¿acaso ya olvidaste cosas?- preguntó burlón, apoyando sus manos en el borde del sofá. -algo, no atiendo a un bebé desde que Leire nació, ahora estoy recordando con Prince y Paris- dijo recargando su cabeza hacía atrás en lo acolchonado, mientras le sonreía.

-Y el que viene- le respondió mientras se inclinaba a besarle a sus labios, para después en una sonrisa de auténtico enamorado regresó a la cocina con ya Leire esperándole.

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De un par de minutos se escuchó como movían la perilla de la gran puerta, al divisar, tanto Indivar con todavía Prince en sus brazos, y que Michael asomara la cabeza desde la cocina.

-Encontré a un vagabundo en la puerta de casa- alzó Bill entre risas mientras dejaba el camino libre a, Jeffrey quien entraba después.

-¡oye!- emuló burlón.

-¡Jeff! ¿Cómo te fue en tu día de Orientación?- preguntó Indivar desde la sala.

-Cansado, pero genial-respondió mientras dejaba su mochila al borde del sofá de justo alado.

-Ven siéntate- dio palmaditas a su lado, ya que al ver su fatiga en una cara tan joven, sentía su instinto maternal salir a flote.

-¡no! vengo en transporte público y mi ropa no debe estar tan limpia, mejor tomaré una ducha- emuló mientras jalaba algo de aire. -De acuerdo pero mínimo toma algo de agua- emuló en una preocupada respuesta mientras ya el joven caminaba a la cocina.

Al llegar casi se detiene en seco al toparse a Jackson.

-Oh, Señor Michael, pensé que todavía no estaba en casa- emuló nervioso en lo que llegaba al refrigerador. -Terminé por hoy, además eran pocos ensayos, quiero estar con Indivar- respondió mientras no despegaba la vista de sus acciones sobre la barra de la cocina.

-¡Jeff!- esa fue Leire en su silla emocionada mientras alzaba sus brazos. -¡Hey! ¡Hola pequeña criatura!- le respondió juguetón mientras pasaba su mano por sus rizos cafés, y le sonreía de regreso.

-Ah, es cierto, ¿su concierto es el mes que viene, no?- preguntó mientras destapaba una botella de agua.

Al darle la razón, el joven desvió la mirada pensativo. -Aunque el mes pase demasiado rápido, ¿no cree que está justo de tiempo?- completó.

-Ya lo creo, pero como sabes del estado de Indivar, y justamente en Junio se cumplen los 3 meses, quisiera pasar el mayor tiempo con ella, por...cualquier cosa...-decía ya divisando al joven delante suya.

-¿Piensa retrasar el Tour?- cuestionó Jeff, -creo que es lo correcto- le respondió levantando la vista por completo, pero, divisando un par de lindos ojos detrás del joven.

-¿Qué es lo correcto?- emuló inocente mientras dejaba el biberón en la barra y se colocaba a Prince en el hombro para sacarle el aire en su pancita.

-Creo que Michael va a retrasar sus conciertos...- emuló Jeff, -¿qué?- cuestionó Indivar.

-Jeffrey, ella no sabía...-alzó entre risas nerviosas del otro lado de la barra.

-Oh, lo lamento...-trató de disculparse rápidamente, -¿qué sucede? ¿Michael?- pregunto Indivar.

-Tranquilo, se iba a enterar tarde o temprano...cariño- alzó Jackson. -Tenía planeado retrasar un mes el concierto que en primera instancia era en Junio, por tu estado, pero sin que supieras, ya que...no ibas a querer- completó.

-¡Michael! ¡Eso es absurdo! ¡¿Cómo por qué retrasarías...?!- trató de cuestionar Indivar.

-Ya que el mes que viene, se cumplen los 3 meses, y quiero estar contigo...-le interrumpió gentilmente, logrando un silencio total en la cocina...

-Michael, no puedo permitirte que hagas eso...yo...estaré bien- respondió con una tenue voz.

-No, cariño, es sólo un mes, no pasa tanto retrasar fechas y...-ahora él no logró terminar ya que habló su esposa.

-Eso dices tú, ¿qué hay de todo el mundo de gente detrás de ésto? ¿Todos comprenderán que es por mi estado? ¡Algunos ni les ha de importar, Michael!- emuló.

-Cariño, soy el jefe, si quiero retrasarlo hasta Diciembre de éste año o del próximo, ellos lo van a hacer sin titubear- dijo con aires de seriedad mientras limpiaba sus manos de la masa aún líquida.

-Michael no seas así...yo, no podría cargar con esa consciencia- alzó Indivar.

Hubo otro silencio, Jackson de tener la mirada baja, observó como Leire le mostraba algo a su madre, y ella le correspondía con una sonrisa, mientras Jeff seguía tomando agua y viéndolas.

-De acuerdo, tienes razón, no debo pensar así, sería...egoísta...-alzó, llamando la atención.

-El concierto en Seúl será el 25 de Junio, pero te propongo que me quede la mayoría del mes contigo y hasta el 20 me voy, tendré 5 días para ensayar allá, ¿te parece?- alzó una solución.

-Me parece bien- respondió después de breves segundos de estar en silencio, en una amplia sonrisa.

-¡Eso suena genial! ¡Señor Jackson cuidaré de Indivar como si fuera mi madre!- alzó Jeff de último mientras daba pasos para adentrarse al pasillo y llegar a las escaleras.

Indivar despidió al joven mientras giraba de nuevo a su esposo y a Leire para observarlos como llevaban a cabo el ritual para concluir con la cena.



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Lo prometo con el corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora