The babysitter. [Matt Shadows Y Tú]

Capítulo 15: ¿¡Que hace aquí!?

-Estás tan mojada...- Matt empezó a introducir sus dedos en mí.
-Matt...por favor... quiero que me hagas tuya...ahora...- dije entre gemidos. Matt sonrió y se quitó sus bóxers. Mierda, de verdad era muy grande.

-Volteate, linda.- dijo Matt. Yo lo obedecí. Me coloqué encima de mis rodillas y me incliné apoyándome sobre mis codos.

Comenzó a besar mi espalda, yo a éste punto ya no podía parar de gemir. De repente dejó de besar mi espalda. Tomó mis caderas y me penetró de golpe. Yo pegué un grito de dolor y de placer, más de placer que de dolor. Matt besó mi hombro y comenzó a moverse. Involuntariamente me comencé a mover yo también. Al hacer esto escuché que Matt soltó un gemido ronco. Matt comenzó a ir un poco más rápido y dio una dura palmada en mi trasero. Yo di un leve grito.

-Eso fue por ser sarcástica.- me susurró Matt sin parar de moverse. Dio otra palmada en el mismo lugar. Grité nuevamente.
-Y eso por ponerme celoso.- dijo Matt con voz ronca.
-¡Ahhh...Matt!...- grité fuertemente.
-Shh...calla, preciosa, no querrás que mis hijos nos escuchen.- Matt puso su mano tapando mi boca. Tenía razón, estaba gritando muy fuerte, traté de calmarme. Pero Matt empezó a ir demasiado rápido, jalé una de las almohadas de Matt y la mordí para evitar gritar demasiado.

Matt se inclinó y mordió mi hombro para evitar hacer lo mismo. No pude soportarlo más y me corrí dando un fuerte grito, podía sentir como mi entrepierna escurría. Matt me embistió un par de veces más y se corrió dentro de mí. Gemí sintiendo ese líquido tan caliente adentro. Matt sacó su miembro yo me recosté tratando de controlar mi respiración, él se recostó encima de mí poniendo su cabeza en mi pecho. Sentía su respiración agitada contra mi piel. Yo acaricié su cabello tranquilizándolo.

Una vez que nuestras respiraciones se regularon él se acostó a mi lado y me abrazó.

-Se ve que tienes experiencia en esto.- dijo Matt.
-Hahahaha...no, no mucha.- reí.
-Pues no estuviste nada mal, preciosa.- Matt besó mi frente.
-Sólo había tenido relaciones una vez...- reí tímidamente.
-Hahaha..¿hablas en serio?- preguntó Matt.
-Sí hablo muy enserio.- dije.
-¿Pero cómo es que una mujer tan irresistible como tú sólo haya tenido relaciones una vez?- Matt me volteó a ver.
-Bueno, yo no me considero así...pero la única vez que tuve relaciones fue con un chico que conocí en un antro...sí estaba algo borracha, pero bueno..no sé si era porque él también era virgen o porque era precoz, pero no pasamos así ni dos minutos y ya se había venido.- solté una carcajada.
-Hahahahaha no puede ser, ¿y te dolió?- preguntó Matt divertido.
-Casi no, quizás por mi estado de ebriedad.- reí. -No, pero ahí no acaba la historia... el tipo no sabía ni siquiera ponerse bien un condón. Se lo puso todo mal. Y al salirse me dejó el condón adentro.- Matt comenzó a carcajearse sin parar.
-¿Y qué hiciste?- preguntó.
-Había ido a ese antro con una amiga, así que le tuve que pedir que me acompañara al hospital a que me lo sacaran.- reí tapándome la boca.
-¿Qué edad tenía el chico?-
-No lo sé, quizás como 22 años. Yo tenía 19.-

Matt se rió conmigo sobre mi experiencia. Lo que me hizo acordarme de algo...

-Matt, no usamos condón y te viniste adentro.- dije preocupada.
-Descuida, preciosa, mañana compraré una pastilla para que te la tomes.- Matt me abrazó.
-Está bien...- dije dando un beso en su mejilla. Me levanté de la cama cubriendome con la sábana. -¿Me puedo bañar aquí?- le pregunté.
-Claro, linda, pero con una condición.- Matt jaló las sábanas dejándome desnuda otra vez.
-¿Cuál?- reí.
-Siempre y cuando sea conmigo.- Matt guiñó un ojo.
-Oook...- dije rodeando los ojos.

Matt se puso sus bóxers y se levantó de la cama.

-Voy a preparar el agua, tú espérame ahí, linda.- dijo entrando al baño. Yo me volví a cubrir con la sábana de Matt y me paré enfrente del espejo. Pude observar un hilito de líquido blanco escurriendo y cayendo al suelo. Llevé dos dedos para mi entrepierna los saqué y los miré. Por alguna razón me dieron ganas de saber a qué sabían los fluidos del hombre que más me gustaba en este mundo, así que llevé ambos dedos a mi boca y los chupé. Era de un sabor agridulce y la consistencia no era nada desagradable. Sonreí al pensar lo que podría hacer sabiendo el sabor de aquel líquido que brotaba de él. La voz de Matt me sacó de mis sucios pensamientos.

-¿Qué estás haciendo, linda?- preguntó Matt al verme aún con ambos dedos en mi boca.
-Sólo probaba un poco de ti.- dije sacando los dedos de mi boca. Él me miró extrañado, no sabía a qué me refería. Yo tiré la sábana al piso y volví a llevar mis dedos a mi entrepierna saqué un poco de ese líquido y se lo mostré a Matt. Él sonrió al saber a qué me refería. Llevé mis dedos a mi boca y chupé nuevamente al mismo tiempo que tocaba las puntas de mi cabello con la otra mano. Mirándolo de manera coqueta.

Él rodeó mi cintura con sus brazos y me besó.

-Me pones tan caliente...- dijo Matt sobre mis labios.
-¿Ya está el agua?- pregunté cambiando de tema.
-Sí, ya está, ven.- tomó mi mano y me metió al baño y cerró la puerta. Su baño era aún más grande que el de las demás habitaciones. Me metí al jacuzzi lleno de espuma y agua caliente y me senté. Matt se quitó sus boxérs y se metió después de mí. Se colocó atrás de mí y me abrazó por atrás. Yo giré mi cabeza y lo besé en los labios. Tenía mucho tiempo que no me sentía tan feliz, su compañía me hacía sentirme llena emocionalmente, y hasta segura de mí misma.

Tomé el shampoo, me lavé el cabello y me enjuagué. Matt tomó un poco de jabón líquido y comenzó a enjabonar todo mi cuerpo. El roce de sus manos en cada parte de mí estaba poniéndome caliente otra vez. Empecé a soltar pequeños gemidos. Me giré quedando de frente con él. Tomé el jabón y froté un poco mis manos Matt sólo me miraba. Llevé ambas manos a su miembro y comencé a masajearlo de arriba a abajo. Quería devolverle el placer que tanto me había dado hace algunos minutos.

-Oh sí...- dijo Matt echando su cabeza para atrás. Sin dejar de darle placer me incliné hacía adelante para besarlo. Él mordió mis labios.
-Auch...-dije separándome de él riendo. Él sonrió y cerró sus ojos disfrutando de la sensación.
-Ah...- Matt gimió roncamente. -___, hazlo más rápido.- me dijo.

Yo sonreí y lo obedecí, mis manos fueron más rápido, con mi dedo pulgar daba suaves masajes en la punta.

-___ no pares...- pidió Matt con sus ojos cerrados. Subí aún más la velocidad.
-¡Ahhhh...!- Matt soltó un ronco grito al mismo tiempo que se corría en el agua. Él me sonrió y comenzó a besarme metiendo su lengua en mi boca, tomó mis pechos y los masajeo, gemí cortamente.

Escuchamos unos golpecitos en la puerta de entrada de la habitación de Matt y nos separamos de golpe.

-¿Quién será?- pregunté.
-No sé, debe de ser alguno de los niños, espera ahí, linda.- Matt salió del jacuzzi y se colocó una bata, salió del baño dejando la puerta entre abierta.

Matt.

Até bien mi bata y abrí la puerta de mi habitación. Vi a Val ahí parada, mierda, mierda, mierda.

-¿Tú qué coño haces aquí?- pregunté enojado.
-Vine a ver a mis hijos.- respondió.
-Ahm...¿ellos te abrieron?- pregunté.
-Sí, Riv me abrió.-
-Papi, ¿por qué mi mami ya no tiene llaves de la casa?- preguntó Riv. Val me miró fijamente.
-¿No les has dicho, Matthew?- preguntó Val.
-¿Decirnos qué, papi?- Riv ladeó la cabeza confundido.
-No, Valary, estaba esperando a que vineras...- respondí.
-Ay...que geniales pretextos.- dijo Valary sarcástica. Yo la miré feo.
-Ahm...hijo...busca a tu hermano y esperenos en la sala, ¿sí?, tenemos que hablar con ustedes.- le dije a Riv.
-Está bien, papi.- Riv bajó.
-¿No crees que es muy temprano para estar en bata?- Val me miró de arriba a abajo y yo miré la hora, eran las seis de la tarde. -¿Y por qué tienes cara como si hubiéses tenido un orgasmo?- preguntó Val.