Jane Renace

XV

«Henry por favor no me hagas esto, por favor...Henry...Henry...oh Henry...vuelve»

Las palabras que Jane repetía en sueños lo hicieron explotar. Ese maldito se hacía presente otra vez y tal vez siempre este presente en su matrimonio porque ella en el fondo lo ama esa conclusión encolerizo aún más a Alexander. Pero ahora Jane era su esposa y no iba a tolerar que el maldito de  thomas se acercará a ella y en lo que respectaba a su esposa la mantendría vigilada a sol y sombra porque sencillamente no confiaba en ella.

Sabía que no era un matrimonio por amor pero ella era su mujer y lo debería de respetar hasta el final de sus vida.

Intento racionalizar y perder la cordura porque era sólo un sueño...no podia enojarse tanto por un maldito sueño pero no pudo evitarlo porque en el fondo sabía que Henry Thomas era el primer amor de Jane, el padre de su hijo.

No quiso tratarla mal sin embargo no podía mirarla a los ojos sin recordar como Ella llamaba a otro hombre.

Y se asustó porque no quería perder la cordura...no quería convertirse en su padre.

Luego de darle vueltas al asunto y arrepentirse por su arrebato sobre todo al darse cuenta de su irracionalidad savia que debía disculparse además se suponía que pasarían unos días juntos así que había decidido que arreglaría la situación durante el viaje de regreso a Sussex ya que no quería dejarla allí y regresar a Londres estando en malos términos con ella.

Al otro día descubrió que su esposa estaba igual o más enojada con él ya que lo ignoraba totalmente, no desayuno junto él y sólo se dirigió a su lado cuando el carruaje estuvo listo.

Dentro del carruaje las cosas no iban bien. Así que decidió dirigirse a ella con mucho cuidado.

— ¿Descanso bien My Lady?

Escuetamente y sin mirarlo respondió en forma automática.

—Si.

«maldita sea» Dijo Alexander para sus adentros sabiendo que esa muchachita esperaba cualquier excusa para atacar así que continuó con sus buenos modales.

— ¿Desayuno correctamente?

— Si.

— Espero que se sienta mejor hoy.
— Si.
—¿Va a ignorarme todo el viajé?
—Si.

Pasaría a la siguiente estrategia la que descubrió que siempre le funcionaba con ella.

—  Tan madura como siempre.

Ella lo miro indignada a la cara y se preparaba para responderle.«excelente» se dijo a sí mismo.

— Apenas me conoce, no tiene idea de cómo soy y no Soy inmadura mientra que usted si lo es. — escupió Jane.

Alexander no pudo evitar reír ante la declaración de la joven quien decidió volver a  ignorarlo y observar el paisaje .

Ella dormía cuando sintió que el carruaje se detuvo y despertó así que él decidió que era hora de hacer las pases con ella.

— vayamos a caminar un poco así los caballos toman agua.

— prefiero quedarme aquí.
— vamos Jane te hará bien tomar aire fresco y caminar un poco hazlo por el bebé. — Le dijo en tono amistoso.

— Está bien.sólo por eso lo haré .

El la ayudo a bajar del carruaje y comenzaron a caminar en silencio por el paisaje boscoso durante la siguiente media hora. Cuando el la noto relajada decidió actuar. Se paro delante de ella y mirándola a los ojos le dijo.