Jane Renace

XXXV

Glamorgan,Gales,3 de mayo de 1816

Tres meses habían pasado desde que Jane habia abandonado Londres.Ella,Elizabeth y Sophie se habían instalado en una pequeña pero cómoda casa en la península de gower lo que le aseguraba estar lejos de su esposo y también de sus padres.
Vivían solas acompañadas de un matrimonio de edad media a los que charles había contratado para las tareas aunque sabía que de los gastos se hacía cargo su esposo y que su hermano solo era un intermediario. Charles las visitaba una vez por mes Y se quedaba unos días con ellas.
Si bien contaba con Elizabeth,charles y sobre todo con el amor de su hija estos meses habían sido muy duros para ella porque el enojó y la ira que sentía para con su esposo dieron paso al dolor y aunque intentará con todas sus fuerzas sabía que no podía dejar de amar a Alexander  aún cuando él no mereciera su amor.

La única noticia que había recibido del duque había llegado semanas después de su huida cuando Charlie las alcanzó en el camino trayendo consigo los baules con las pertenencias de las tres mujeres.

Flashback
— Dijo que acepta esta separación porque sabe que es el único responsable pero que para él es una separación temporal.

—Eso no lo decide él,yo no tengo intención de regresar a su lado Charlie—Respondió a la defensiva.

—Sabes que yo apoyo lo que tú decidas pero entiende que él es tu esposo...aprovecha Este tiempo para pensar fríamente que es lo que quieres para tu futuro.

—Lo sé Charles y te lo agradezco pero ahora sólo quiero alejarme.

—Está bien Jane...Norfolk me dijo que te entregué esta carta para que la leas cuando estés lista.

Jane tomo la carta en sus manos con intenciones de romperla pero Elizabeth se lo impidió.

—No hagas eso jane yo la guardaré y la lees cuando estés más serena.

—De acuerdo Liz.

Fin del Flashback.

Jane había salido a caminar por la playa, le encantaba sentir el viento golpear su rostro y la arena hundirse en sus pies.Necesitaba estar sola para meditar sobre una idea que se le había ocurrido hace unos días y que luego de analizarla bien consideraba que era la mejor opción para recomenzar una nueva vida.

Caminaba de regreso a su hogar cuando vio como un carruaje se dirigía camino a este y pensó que se trataba de su hermano así que apuró el paso cuando llegó entró corriendo a la casa.

— ¡No te esperábamos tan pronto admite que no puedes estar sin nosotras!—Su risa se esfumó cuando lo vio allí con sophie en brazos, el Duque de Norfolk en todo su esplendor.

— No, no puedo vivir sin ustedes—Respondio sincero mientras miraba a su esposa la cual estaba más bella que nunca.

—¿Qué hace usted aquí? Sabe que no es bienvenido—Jane respondió con frialdad y enojó.

— Se que estoy rompiendo mi palabra pero necesitaba verlas hace tres meses que están lejos de mi.

— Usted es el único responsable de ello además yo no deseo verlo ni hablar con usted.

—Lo se y aceptó mi castigo pero mi hija si quiere verme y sabes que no puedes evitarlo...Tú puedes evitarme pero sophie no debe seguir pagando por mis errores.

Jane vio como sophie se desesperaba por llamar la atención de su padre, acariciando el rostro de Alexander,riéndose con complicidad cuando su padre hablaba y entendió que el Duque tenía razón. Sophie lo extrañaba y necesitaba.

—Está bien, tiene razón. puede visitarla y compartir momentos con ella pero yo no estaré presente.

—Me parece bien pero tú sabes que debemos hablar Jane.

—Lo se pero ahora soy yo la que no quiere hablar y si me disculpa su gracia, me retiro.

Alexander quedó solo con sophie en el living de la casa ya que Elizabeth se disculpó y fue detrás de Jane.

—Sabes sophie tu papá es un imbécil pero te prometo que volveremos a ser una familia—las palabras del duque hicieron reír a la niña lo que hizo que su padre se emocionara y la llevará de besos en su pancita.

Estos meses para Alexander fueron un calvario. Se había vuelto un ermitaño que hacía pagar su dolor y malhumor con el primero que se cruzará en su camino.Necesitaba a su mujer y a su hija de regreso y sabía que tenía que darle tiempo a Jane para que lamiera las heridas que él  habia causado pero no le alcanzaba sólo con las breves noticias que su cuñado le transmitía.
El primer mes ocupó su mente y su tiempo en la venganza hacia Henry Thomas pero para cuando ese desgraciado  perdió lo poco que le quedaba y  purgaba condena en la cárcel de deudores;Alexander se dio cuenta que no podría resistir mucho tiempo más sin ir en busca de Jane. De nada le servía hundirse en el trabajo ni escuchar los consejos de Patrick cuando sabía que en cualquier momento viajaría a Gales a recuperar a su familia.

Sabía que obtener el perdon Jane sería muy difícil debido a que ni él mismo podía perdonarse su comportamiento pero haría hasta lo imposible por lograrlo.
Cuando llego a la casa de su esposa y vio a sophie en brazos de Elizabeth no pudo evitar ir directamente hacia la niña para tomarla en sus brazos y abrazarla, había extrañado tanto a su hija «Mi sophie, mi niña».
Con su hija en brazos se dirigió hacia Elizabeth.

— Se que con pedirle disculpas no alcanza para limpiar las ofensas contra su persona pero sepa señorita Watson que me arrepiento todos los días por haber sido un imbécil y espero que algún día pueda Perdóname.

—Es un buen comienzo su gracia—Dijo Elizabeth con una tímida sonrisa.

En ese momento jane entró al cuarto y Alexander sintió que su corazón volvía a latir.
Escucharla hablarle con tanto dolor y enfado le hizo saber que debería actuar con inteligencia si quería tener una nueva oportunidad así que cuando Jane aceptó las visitas a sophie supo que ese era un pequeño primer paso para llegar a su objetivo además de que tomo la decisión de que no se iría de Gales sin su familia.

Mientras tanto una Jane fuera de quicio caminaba de un lado a otro de su habitación cuando Elizabeth hizo su entrada.

— justo ahora que había decidido volver a empezar tenía que aparecer nuevamente en nuestras vidas.

—Calmate Jane sabes que el enojó no te deja ver bien las cosas.

—No puedo calmarme cuando él está aquí yo no estoy lista para enfrentarlo

— Creo que no tienes opción, amiga.

—Odio que tengas razón pero ya que está aquí enfrentare la situación y le comunicare la decision que he tomado.

—Espero que estés segura de eso. No puedes arrastrar a la niña en algo que sabes que es  tan riesgoso además ahora con el Duque aquí no es tan fácil de hacer.

Las palabras de su amiga la dejaron aún más conflictuada, sabía que Lizzie tenía razón en todo sobre todo en el hecho de que la presencia de Alexander hacia todo más difícil sino imposibles.

Perdón por la tardanza pero estuve con problemas técnicos 🙏🙏😘😘
Falta muy poco para el final😭