가장 친한 친구

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La luz solar se hizo presente en la ventana de Jimin, avisando el amanecer. Aquello hizo remover un poco al mayor, sintiéndose incómodo por la claridad. Atrapó una almohada en sus brazos y se acomodó en posición fetal, quería dormir un poco más.

Pero fue el tono de llamada de su teléfono lo que le impidió dormir tranquilo, despertándolo de su ensoñación. Se sentó en el borde de la cama y agarró su teléfono, pasó desapercibido el nombre en la pantalla y contestó.

—¿Si? —cuestionó con voz ronca.

—Lamento haberte despertado, Jimin. —espetó detrás de la línea.

Jimin suspiró.

—Hola Taehyung. —murmuró con pereza.

—Yo quería disculparme contigo. Ayer no pude ir al parque al que habíamos acordado, se me presentó un inconveniente. —habló nervioso.

¿Incoveniente?

—Pidele disculpas también a Hoseok, él quería verte y acompañarme. —respondió risueño.

El corazón del contrario latió con fuerza y le fue inevitable no sonreír.

Quizás Jungkook no estaba hecho para corresponderle...

—Oh, han pasado años en los que no veo a tu primo. ¿Como está él? —preguntó con curiosidad.

—Bien. De hecho se quedará algunos meses en mi casa, quiere descansar un poco de sus viajes.

Taehyung soltó una risita.

—Ya es todo un hombre, supongo. —dijo, imaginando a aquel apuesto pelirrojo.

Jimin soltó una carcajada.

—No te voy a mentir. Mi primo se puso bueno en estos años.

—Vale. Jimin, te dejo, tengo que hacer algunas cosas. Luego podremos acordar una salida con Hobi. Mandale saludos de mi parte.

El omega negó sonriendo.

—Lo haré. Cuidate.

—Adiós, Jimin. —se despidió.

—Bye.

Jimin colgó la llamada y se levantó de su cama. Estiró sus brazos y movió un poco su cadera, haciendo tronar los huesos de aquellas partes. Se dirigió a su otra mesa de noche para tomar su cepillo de dientes, pero se percató de la caja de supresores al lado del objeto.

Estaba intacta, totalmente cerrada.

Había olvidado tomarse un supresor.

De nuevo...

La mañana de Jungkook se había tornado aburrida, y más si estaba solo. Su desayuno se basaba en una taza de cereal con leche, algo básico, pero lo suficiente para llenar su estómago. Por suerte, hoy no tendría que hacer muchas cosas, por lo tanto estaría en casa, sin hacer nada.

Había quedado en invitar a su mejor amigo para romper el hielo y acabar con su aburrimiento.

Si, porque Taeyung ya no era considerado su mejor amigo. Mucho menos parte de su vida.

El timbre de su casa sonó, por lo tanto suspuso que era su mejor amigo.

Abrió la puerta y se encontró con un chico alto, de tez morena, hoyuelos en sus mejillas y cabello negro. También poseía el aroma digno de un alfa.

Sonrió y le brindó un abrazo bastante cariñoso.

—¡Namjoon! Joder, pedazo de escroto. Te había extrañado. —espetó sonriendo, aún aferrado a los brazos del moreno.

El mayor rompió el abrazo, mirando el aspecto de su mejor amigo. Soltó una carcajada al notar la pijama de conejos que este traía.

—Uy, te faltó el biberon. —dijo burlón.

Jungkook le fulminó con la mirada.

—Entra de una buena vez. —soltó brusco.

—Lo siento Darryl, ¿te lastimé la vagina?

El castaño empujó al mayor dentro de su casa, aun enojado. Namjoon solo reía por las actitudes de Jeon, a veces se comportaba como un infante. Los dos pasaron un buen rato juntos. Vieron películas, jugaron videojuegos, etc.

Pero lo que Jungkook necesitaba ahora, era desahogar sus sentimientos con alguien.

Namjoon era el indicado para ello.

Continuará...

Necesito que me perdonen; por no actualizar, y por tornar la trama del fic aburrida. Pero por ahora todo está empezando. Como había dicho antes, se narra de un día a otro y posiblemente eso lo haga más largo :(

Perdón. Besos.


Love Me Now 국민 [J.Jk + P.Jm]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora