37. Moon River

256 40 12
                                    

- ¿En dónde está el señor Lex?

- Mi señor no está disponible para conversar con usted señorita. Usted debería dejar de estar ansiosa y pensar que en este preciso momento es una cantante profesional.

- Lo sé, el señor Luthor me hizo entender que lo pretendiera.

- Y tiene que hacerlo bien. Le daré un buen consejo señorita Danvers: mientras esté en el escenario trate de mentalizarse como si usted ha logrado consolidarse como estrella de la canción y por nada del mundo tiene que mostrar su inexperiencia ante el público que la escuchará cantar.

- No, no puedo señor. Usted me pide que mienta y según el señor Lex debo ser yo misma.

- Escuche señorita Danvers, no se qué y no voy a atreverme a cuestionar las decisiones que toma mi señor.
Él la ha conocido en el último tiempo y tuvo sus motivos para buscarla a usted cuando pudo fácilmente llamar a sus amigas y estoy hablando de las exuberantes Rockettes.

- ¿Roque, qué?

- Bailarinas profesionales de Las Vegas señorita.

- Esta bien.

- 5 minutos para la salida de la señora Swayer - se escuchaba decir de un sujeto que estaba preparando los últimos detalles para la participación de la cantante.

Donnagon no estaba del todo convencido con la idea de Lex sobre llevar a una cantante desconocida haciéndola pasar como una profesional en medio de la gran festividad del clan Luthor.
La sola idea era disparatada pero estaba siendo realizada aún con todas las probabilidades de que se convierta en un bochornoso acto del que seguro los periódicos titularán por semanas.

Pero ahí estaba el fiel chofer, tratando de servir de apoyo a la joven Danvers quien en sus adentros el pánico y la confusión se apoderaban de su ser y debía controlarse para no colapsar mientras estuviera el escenario.

***

Bill Donnagon.
Un hombre de unos 40 años de edad era el trabajador de más confianza del joven magnate.
Además de servirle como su chófer personal, el joven Luthor era el padrino de bautismo de sus hijos gemelos de 3 años y que durante su crecimiento el magnate los apoyaría en su educación.

También como favor el clan Luthor ofrecía a la familia del chófer un palacete en la propiedad de veraneo en Newport que debían de residir ahí hasta la temporada de vacaciones, las compartían con todos los lujos obtenidos de los Luthor.

Entre unas cosa a otras el chófer siempre estaba a la disposición de velar por los intereses del magnate así como también de los miembros del clan Luthor.

Siendo éste el sujeto más cercano a Lex, también conocía los movimientos financieros del magnate, y si, también le conocía a las conquistas del joven, por muy desinteresado que estuviese en tratar asuntos personales del magnate pero ahora, una vez más sirviendo a las peticiones del patrón, por muy absurdos que fueran sus favores pero ahí estaba, apoyando a Kara en un momento crítico de su vida.

***

- Oh, por Dios, ya es mi turno.

- Debo cerciorarme de otras cosas mientras usted esté confiada en el escenario. Todo tiene que salir bien.

- Esta bien señor, haré todo lo que se me pida.

- Entonces, mi trabajo está hecho.
Rompase la pierna señorita.

La Heredera Y La Cantante LIBRO 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora