— Rose, ya estoy aquí. – escucho la voz de James.
— James – susurro. – Tengo frío.
— Rose – al decir mi nombre con pocas letras, su voz se quiebra. – Vas a estar bien. – quisiera creerle, aunque la verdad no es así. Ian tenía razón.
— Perdón, por ver más al pasado y no poder formar un futuro juntos – hago una pausa en cada palabra que digo, mi voz es débil, cuando por fin abro los ojos lo veo llorando.
— No, si vamos a estar juntos, yo sé que sí. – sonrió y lo miro nuevamente.
— Cuídalo mucho – susurro, James niega y tomo su mano. – Escúchame. – se pone de rodillas a un lado mío y puedo tocar su rostro. – Aún puedes ser feliz con alguien más.
— No... Rose, vamos a salir juntos, vamos a vivir muchos años juntos. –presiona mi mano, tomo aire y lo libero lentamente.
— Cada día que vivimos me hiciste la mujer más feliz, por eso quiero pedirte que lo sigas siendo. – tomo aire nuevamente y digo: – Sé que serás el mejor padre, mi familia y amigos te ayudaran, no te quiero encadenar a mí, quiero que vivas feliz y deseo... que sea una buena mujer, que te amé igual o más que yo.
— Rose, no digas eso. – presiona su mandíbula y puedo notarlo.
— Te amo – susurro.
— Yo también te amo – una lagrima viaja alrededor de su mejilla y la limpio.
— ¿Puedes ir por nuestro bebé? – pregunta y asiente. Lo veo salir y trato de tomar fuerzas, comienzo a cerrar mis ojos y sentir una presión en el pecho, quizá esta es la razón de las cartas.
— Aquí esta nuestro bebé – dice James, sonrió al verlo cargarlo, una enfermera lo acompaña.
— Háblale de mí cuando no este. – mis parpados pesan. – Cuéntale de lo feliz que fuimos juntos, la emoción de verlo la primera vez y el amor incondicional que acabas de experimentar por él. Desde dónde yo este, siempre estaré con ustedes, cuidándolos y guiándolos. – presiona sus labios y acuna a nuestro bebé, quisiera ver sus ojos y poder decirle que lo amo, pero sé que ya lo sabe.
— No one ever said it would be this hard
— Oh take me back to the start – me muestra una sonrisa triste y mi cuerpo es cada vez más débil.
— No sabes cuento te amé desde la primera vez que te vi, tus ojos, tu sonrisa, toda tú. – le dedico una sonrisa, mi respiración es agitada.
— Aun no puedo creer que me enamoré del extraño del avión. – contesto, ríe y niega.
— Te amo Rose Land – me da un dulce beso en los labios, parpadeo un segundo y digo:
— Te amo James Monroe. – la enfermera parece devastada ante nuestra escena, toma a nuestro bebé en brazos y sale de la habitación. – Deseo que seas muy feliz James.
— Sin ti no va a ser así. – acaricio su mejilla y cierra los ojos, sus labios rozan los míos y con ese beso, se va mi último aliento.
Un pequeño problema legal se encuentra presente, el pequeño ahora no tiene padres legalmente. Tras la muerte de Ian Walker y Rose Land, el pequeño se encuentra solo. James al ser su padre biológico, comienza un proceso para demostrarlo. Nicholas Cooper y Nancy Farias se hacen presentes ante la familia el primero siendo abogado de Ian y la segunda, la bogada de Rose.
ESTÁS LEYENDO
SEDÚCEME COMO NUNCA
RomansaDespués de muchas confusiones en la vida y relación que tienen Rose y James, sus intentos por olvidar lo, han sido fallidas, al igual que los intentos por volver a conquistarla, pues al parecer Rose no solo esta en el corazón de James, sino también...