La Conquista

Descansando de las guerras

Josué 11:23

Tomó, pues, Josué toda la tierra, conforme a todo lo que Jehová había dicho a Moisés; y la entregó Josué a los israelitas por herencia conforme a su distribución según sus tribus; y la tierra descansó de la guerra.

Josué se levantó un día y me imagino mirando todo a su alrededor, todo lo alcanzado cuantos reyes derrotados y cuanto territorio alcanzado. La vida de Josué fue una vida donde no se mencionan muchas cosas a nivel personal, pero sí se menciona su valentía, coraje, destreza y estrategia para hacer que todo esto se ejecutara como Dios se lo reveló.

Después de leer todo esto podemos entender francamente porque Dios le repetía una y otra vez esfuérzate y sé valiente.

Pero como toda guerra o situación todo tiene un final.

Eclesiastes 3:8

8... tiempo de guerra, y tiempo de Paz

Aun en nuestra vida personal también es así y es que no toda la vida vamos a estar en guerras y conquistando, también se necesita un proceso para procesar todo lo ocurrido y aprendido. Estas experiencias que aprendemos en momentos así nos marcan y solo Dios puede convertir todas estas experiencias aprendidas en cosas positivas, que nos lleven a disfrutar y agradecer todo lo vivido en momentos difíciles.

Al igual que Josué nosotros también llegaremos a un punto donde podremos ver y tener la satisfacción de que todo lo vivido y aprendido tenía un propósito y que en cada conquista o derrota (porque estas también nos enseñan) que tuvimos Dios estaba presente... y como a Josué Dios también nos ayudará a entender todo de manera tal, que nos levantemos y sigamos sin dudar de la fidelidad de Dios.

Meditar en nuestras victorias y derrotas, nos deja ver nuestra vida de una manera diferente... De hecho nos invita a recapacitar en muchas áreas,  a desarrollar más la fe, la humildad y a comprender mejor el plan de Dios...